Los propietarios de la nave calcinada de Ciudad Naranco la tirarán antes de un mes

El Consistorio no tendrá que actuar subsidiariamente al cerrar un acuerdo "amistoso" con LandCo, la promotora que quiere construir pisos en la zona

Los bomberos, trabajando para apagar el fuego en la nave de Ciudad Naranco el día del incendio. | Miki López

Los bomberos, trabajando para apagar el fuego en la nave de Ciudad Naranco el día del incendio. | Miki López / Félix Vallina

Los propietarios de la nave que se quemó el pasado 3 de febrero en la zona de Almacenes Industriales se harán cargo de su derribo y lo ejecutarán "antes de un mes". El Ayuntamiento, que declaró en ruinas el inmueble de Ciudad Naranco sólo unos días después de que fuese pasto de las llamas, ha llegado a un acuerdo "amistoso" con los representantes de la promotora de suelo del Grupo Santander (LandCo) y no tendrá que actuar de forma subsidiaria para demoler una nave que en los últimos años sólo ha servido como refugio para los okupas. "Han mostrado una disponibilidad total y van a ocuparse de todo", explica satisfecho el concejal de Seguridad, el popular José Ramón Prado.

No en vano, haber llegado a un entendimiento con LandCo le evita al Ayuntamiento enfrentarse a una posible disputa judicial que habría eternizado el derribo. Si los propietarios no hubiesen aceptado el expediente municipal que declara en ruinas el inmueble y hubiesen optado por pleitear, la demolición podría haberse congelado y los vecinos de Ciudad Naranco tendrían que seguir viviendo junto a una nave que ahora mismo permanece acordonada por riesgo de desplome. El cierre de la zona también afecta desde hace un mes a parte de la acera y a uno de los carriles de la calle Coronel Bobes, una de las principales salidas del barrio y un punto en el que abundan los atascos a ciertas horas del día. "Sabemos que los vecinos necesitan que este problema se solucione cuanto antes y estamos trabajando con la máxima celeridad posible", dice el concejal de Seguridad Ciudadana.

Lo único que le pidieron los representantes de LandCo al Ayuntamiento fue un poco de tiempo. "Una vez que les dijimos que se había declarado en ruinas y que queríamos tirarlo cuanto antes lo aceptaron, pero claro, para hacerlo tienen que elaborar un proyecto de demolición y presentárnoslo. No es tan fácil como meter las palas y empezar a tirar paredes", explica Prado. "No obstante, ya están trabajando en ello y estamos seguros de que antes de un mes estará derribada la nave", reitera el concejal de Seguridad.

A la promotora de suelo del Grupo Santander tampoco le viene mal despejar el terreno que ahora ocupa la nave abandonada. Como ya publicó este diario en exclusiva, LandCo tiene intención de presentar una propuesta en el Consistorio para construir en la zona unas 120 viviendas repartidas en tres bloques de entre 5 y 7 alturas. El concejal de Planeamiento, Nacho Cuesta, considera la iniciativa como "una buena noticia" y mostró la disposición municipal a colaborar para agilizar los trámites urbanísticos si el plan sigue adelante. El equipo de Gobierno de Canteli considera que el proyecto serviría para recuperar una zona que lleva años muy degradada y se encuentra a tiro de piedra de la calle Uría.

LandCo, que también ostenta la propiedad de varias naves anexas a la que se quemó durante el último incendio, ya le adelantó a los responsables municipales su idea de sectorizar en tres ámbitos los terrenos sobre los que se levantan las distintas naves abandonadas de la conflictiva calle de Ciudad Naranco. De llevarse a cabo el proyecto, los inversores se comprometerían a desarrollar urbanísticamente toda la manzana de la nave arrasada por el fuego, así como el solar situado al otro lado de la calle y que durante un tiempo fue utilizado como aparcamiento provisional.

La idea que maneja LandCo pasa por levantar dos bloques –uno de cinco alturas y otro de seis– en el suelo que ahora ocupa el inmueble que va a ser demolido y los terrenos aledaños. El proyecto también contempla zonas verdes y un tercer edificio de siete plantas situado frente a los otros dos. Nacho Cuesta también dejó claro que se trata de momento de un boceto inicial y que deberá ser cotejado con las normas vigentes.

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