"El valor del relicario de Tellego solo lo supera la Cámara Santa"

Miguel Dongil (Gijón, 1987) es doctor en Historia y lleva desde 2019 en la República Dominicana como consultor en educación. También divulgador, tiene una decena de libros históricos, principalmente sobre temas regionales. Presenta mañana una de sus últimas publicaciones, "El Relicario de Tellego (Ribera de Arriba), una ruta de peregrinación entre la Cámara Santa y el Monsacro" a las 20.00 horas en "Casa Cristina", en el propio Tellego.

–¿Cómo surge el libro?

–Hay dos formas de llegar a un tema. Interesándose por un tema o por casualidad; y así me llegó. En la iglesia de San Nicolás de Tellego aparece un conjunto de papeles y huesos de los que el párroco no tenía constancia. Parecen unas reliquias y contacta conmigo para contextualizarlo. En principio, era para un pequeño artículo. La investigación terminó en libro porque veo que tienen gran interés para la historia de la región.

–¿Por qué?

–Porque descubro que San Nicolás de Tellego es heredero de San Nicolás de Gurbielles, un monasterio que ya funcionaba en el siglo XII y en el XIII pasa a depender del cabildo de la Catedral. Y concluyo que este relicario es el segundo más valioso de Asturias, solo lo supera la Cámara Santa. No ya en cantidad, que hay unas 50 reliquias, sino en calidad. Hay incluso un fragmento del Santo Sudario.

–¿Cómo es?

–Pequeño, mide unos 2 cm cuadrados. Se conserva en un sobre del siglo XVII. Posiblemente se lo envió el obispo al párroco local, la documentación indica una estrecha relación. Parece una locura recortar algo así, pero en aquel momento no se le daba la misma importancia al Sudario que ahora. Creo que es el único fragmento del que hay referencia.

–¿Qué más restos hay?

–De los Santos Pastores, del momento de la Natividad. La envoltura de un hueso de Santa Eulalia de Mérida, patrona de la diócesis. Un trozo del hábito de Santa Teresa. Hay muy antiguas y de época moderna, del siglo XVI en adelante.

–¿Qué más conclusiones saca?

–Que este relicario y San Nicolás conformaron un centro espiritual, con mucha devoción a finales de la Edad Media y comienzos de la Moderna, vinculado a la Sancta Ovetensis. Fue un punto de peregrinación entre la Catedral y el Monsacro, donde estuvieron las reliquias de la Cámara Santa. A mitad de camino de Oviedo y el Monsacro está Tellego. Es un gran hallazgo y una alegría para mí haber dado con este tesoro.

–¿Hay algún tesoro más en Tellego?

–Pues podría haber habido un cuadro de Tiziano en el altar mayor de la iglesia, que se quemó en 1936. Una revista francesa, "L’Illustration", se hace eco de ese suceso y de la supuesta desaparición de la obra en ese contexto. Hay una foto del altar de la iglesia posterior al incendio en el que el cuadro no está. La revista da una cifra de tasación muy elevada. Es un tema que habría que investigar.