El polígono de Bobes ha despejado su futuro desde el anuncio del desembarco de la multinacional de la logística Amazon, que se instalará en la segunda fase del área industrial sierense. Porque mientras las obras para el desarrollo del proyecto de la compañía americana avanzan a una velocidad de vértigo, también lo hacen a buen ritmo otros planes de empresas que ya han confirmado su presencia en la zona: en la primera fase está ya prevista la ubicación de trece empresas cuya llegada supondrá una inversión total de unos 25 millones de euros. La creación de empleo que se estima generen todas ellas, en conjunto, es de 130 puestos de trabajo.

Bobes abarca un ámbito de actuación total de 1.105.475 metros cuadrados incluyendo viales interiores y zonas libres para tránsito o servicios. La primera fase, ubicada en la zona central del área, alcanza los 500.005 metros brutos. La segunda suma, también en bruto, 243.560 metros: sobre ellos se levantará el complejo de Amazon, si bien la parcela neta a ocupar es de 171.663 metros (la nave será aún mayor en superficie, con 191.135,42 metros, al edificarse en altura, con tres plantas más la baja). Por último, la tercera fase cuenta con otros 361. 910 metros brutos. Será la última en impulsarse, aunque la llegada de la multinacional americana ha desatado el interés por la adquisición de suelo en el lugar y es probable que por ello los plazos iniciales para completar la urbanización del conjunto del polígono se acorten sobre la planificación planteada en el momento de diseñar el desarrollo del área, hace ya varios años.

La multinacional americana realizará una inversión de más de 100 millones de euros para levantar su equipamiento. Creará un millar de empleos en una primera fase de funcionamiento. La magnitud de estas cifras apabulla y podría hacer sombra a cualquier otra iniciativa que se implante en Bobes en el futuro. Pero las previsiones que ya se manejan para la primera fase del polígono no son menores. Ni las correspondientes a las operaciones que ya están en proceso de consolidación ni las que podrían estarlo en un plazo que se espera no sea excesivamente largo.

La estadística con la que se trabaja para el cálculo de inversiones y generación de empleo en desarrollos industriales análogos o anteriores al de Bobes permite realizar estimaciones acerca de los volúmenes económicos y de creación de puestos de trabajo que pueden darse en el área sierense.

Los expertos consultados explican que cada 600 metros cuadrados de parcela se genera un mínimo de 1 o 1,5 puestos de trabajo como valor medio. O que cada 1.000 metros cuadrados de parcela neta acoge una nueva inversión media estimada de unos 300.000 euros, si bien, precisan quienes conocen este tipo de estadísticas, los números varían en función de la actividad finalista que se desarrolle en cada caso.

Si se extrapolan estas estimaciones al conjunto de la extensión neta de la primera fase de Bobes (unos 300.000 metros de los más de 500.000 brutos que suma esta parte del polígono), nos situaríamos en una estimación de que las empresas que se instalen en ella podrían crear unos 700 o 750 puestos de trabajo y alcanzar, también en conjunto, una inversión de más de 90 millones de euros.

No obstante, estas cifras son un “ejercicio teórico”, matizan los expertos, basadas en experiencias en otras áreas industriales y las estimaciones medias que dicta la estadística resultante de ellas. Con todo, es destacable que estos números indiquen que, una vez colmatada de empresas la primera fase, la inversión global se acercaría mucho a la que realizará Amazon, que ha adquirido íntegramente la superficie de la segunda fase, además de otras cuatro parcelas adyacentes –en la primera– para un aparcamiento de camiones que se ubicará sobre 18.400 metros cuadrados.

Los expertos consultados explican que cada 600 metros cuadrados de parcela se genera un mínimo de 1 o 1,5 puestos de trabajo como valor medio. O que cada 1.000 metros cuadrados de parcela neta acoge una nueva inversión media estimada de unos 300.000 euros

Por el momento, la realidad de Bobes es la del proyecto de Amazon en la segunda fase. Y la de la implantación de otras trece en la primera: ocuparán aproximadamente un tercio de la superficie neta de algo más de 300.000 metros. Esto es, unos 100.000 metros ya reservados formalmente y en cuya distribución trabajan ya la sociedad Sogepsa en colaboración con el Instituto de Desarrollo Económico en Industrial del Principado de Asturias (Idepa). Ambas entidades se ocupan actualmente del proceso de adjudicación de parcelas a las compañías que han solicitado formalmente la compra del suelo. El reparto definitivo de las ubicaciones es necesario porque algunas de ellas han elegido el mismo punto dentro de la primera fase y ahora deberá decidirse qué lugar concreto se otorga a cada una de ellas.

La identidad de las empresas que se instalarán en esta primera fase de Bobes es un secreto bien guardado, a excepción del caso de Lejías Los Ángeles, trasladada a este punto desde la segunda fase, donde se ubicaba hace años, para hacerle hueco al proyecto de Amazon. Se conocen, eso sí, algunos de los sectores de actividad a los que se dedicarán, entre otros, transportes, sistemas de seguridad, combustibles o alimentación.