La fabada de Argüelles da el salto a las tiendas gourmet de la mano de Manuel Álvarez, propietario de la marca Vegargüelles y ganador del concurso a la mejor faba de Asturias de este año. Según detalló ayer el productor durante una visita a su explotación del alcalde de Siero, Ángel García, será el mes que viene, si no hay retrasos, cuando saque al mercado las primeras conservas de fabada elaborada con su galardonada legumbre y cocinada por su empresa. El compangu será de la carnicería Armando, de El Berrón, para que todo queda en casa.

"Será un producto gourmet, de alta calidad, no hecho para competir con las latas de fabada de dos euros", subraya Álvarez, quien también valora el hecho de que "todo el proceso, desde la siembra con una semilla que tiene cuarenta años, hasta el envasado se va a hacer aquí". "En función de la producción, un año sacaremos más y otro menos, pero siempre será con nuestra faba", incidió.

Se trata de una iniciativa que mereció el aplauso del regidor, quien ayer ya ofreció las instalaciones municipales para la presentación oficial de un producto en cuyo desarrollo ha participado la Asociación de Investigación de Industrias de la Carne del Principado de Asturias (Asincar). "Esto es un ejemplo de la diversidad económica de Siero, con industrias y grandes proyectos como el de Amazon, pero también con este tipo de actividades", precisó el regidor.

La plantación actual de Manuel Álvarez en Argüelles es de una hectárea, aunque su previsión es aumentar la superficie de cara al año que viene. El premio a la mejor faba de Asturias, obtenido el pasado mes de abril en el transcurso de la Primera Flor de Grado, ha supuesto un "espaldarazo" para Vegargüelles, al igual que pueden serlo las conservas gourmet que ya tiene prácticamente listas para sacar al mercado.

La producción actual de Álvarez, que compagina su trabajo en Gijón con la plantación de Argüelles, oscila entre mil y mil doscientos kilos. "La cosecha de este año ha sido medio alta, ya que la sequía y las altas temperaturas han resultado perjudiciales, pero no estamos descontentos", añade el productor, quien alerta de que cada año hay menos faba de Argüelles. "La gente se va haciendo mayor y no hay el relevo generacional necesario para mantener la producción que había", señala el actual propietario de una marca que fue pionera en la Indicación Geográfica Protegida (IGP).