Diez mil multas en 59 días, el balance de los radares de Lugones que realiza el PP, que pide "medidas alternativas"

Los populares denuncian "el afán recaudatorio del Gobierno socialista de Siero"

Graciela Velasco, Javier Mateus y Borja Lapuerta, en la zona de Les Bellotines (Lugones). A la derecha de la imagen se aprecia una de las cajas de radar.

Graciela Velasco, Javier Mateus y Borja Lapuerta, en la zona de Les Bellotines (Lugones). A la derecha de la imagen se aprecia una de las cajas de radar. / PP

Los dos radares móviles de tráfico que hay en Lugones pusieron diez mil multas en 59 días, asegura el PP sierense, que avanza que llevará a Pleno el asunto y solicitará “medidas alternativas o complementarias que realmente sean efectivas para asegurar la seguridad vial”.

La edil popular Graciela Velasco, vecina de Lugones, destacó la “sorpresa e indignación” ante la “total falta de planificación y de medidas de prevención” en Lugones por parte del equipo de gobierno, después de conocer la decisión del alcalde de “quitar el radar de Les Bellotines por el agravio que estaban causando a los vecinos y días después volver a colocarlos”. Velasco se refiere así a los dos radares que Siero tiene en Lugones y que se van moviendo entre las 9 cajas existentes en la localidad. 

Velasco reconoce que “el Ayuntamiento tiene que garantizar la seguridad vial”, pero ha instado a tomar conciencia del “malestar” que se están provocando “los constantes cambios de seguridad y el aumento de multas registradas por este radar, ya que parece que el único objetivo sólo sea recaudar”, incide Velasco, que califica de "bandazos" las decisiones que el regidor, Ángel García, ha ido tomando respecto a este asunto.

La concejala del PP defiende que existen otros elementos para aumentar la seguridad vial en cualquier punto del concejo sierense sin tener que multar a los vecinos, como señales verticales, bandas sonoras o badenes, “entre otras que pueden valorar desde el equipo de Gobierno”. 

"Antaño había muchas quejas por la velocidad en ese tramo, algo que se solucionó en gran parte con la colocación de la rotonda, ya que obliga a los conductores a entrar en esa vía a menor velocidad”, apunta la concejala. De hecho, según los datos municipales, el 60 por ciento de las sanciones corresponden a velocidades entre 48 y 50 kilómetros por hora y sólo un 5 por ciento de ellas a velocidades que superen los 60 kilómetros por hora.

“Bien parece que el Alcalde y su gobierno han decidido abogar por la vía fácil, aunque sea a coste de la economía de los vecinos. Si de verdad les importa la seguridad vial, no es necesario recurrir a radares y a multas”, concluye.