Que un diario de la trayectoria y proyección de LA NUEVA ESPAÑA se proponga realizar una edición para Siero es un signo de la pujanza social y económica de un concejo caracterizado por una sociedad bien trabada y que reclama una información local, un periodismo de proximidad que propicie la respuesta adecuada. En la era de la globalización, la edición local potencia el sentido de comunidad, así como la oportunidad de hacer sentir a los hombres y mujeres de Siero su protagonismo en la misma, al tiempo que se acrecienta su sentimiento de pertenencia.

Siero tiene una ubicación geográfica privilegiada en el centro del área metropolitana de Asturias. Esta  circunstancia, unida a la bonhomía que caracteriza a los sierenses, y al buen hacer de las instituciones locales apoyadas por las de alcance regional, logra –es un hecho- atraer población y actividad económica tras la crisis industrial y ha convertido a Siero en uno de los ámbitos de referencia más importante de Asturias, y no solo por razón del número de habitantes.

En la era de la globalización, la edición local potencia el sentido de comunidad, así como la oportunidad de hacer sentir a los hombres y mujeres de Siero su protagonismo en la misma

Siero constituye un territorio colonizado por una sociedad vitalista y emprendedora, dotada de un ecosistema en clave de asociacionismo cada vez más pujante. Dispone, asimismo, de un dispositivo de servicios públicos de gran potencia -sanidad, educación, servicios sociales- y unas infraestructuras industriales y de comunicación privilegiadas que constituyen un factor de atracción empresarial de primer nivel, con resultados muy satisfactorios, como lo prueba la reciente decisión de implantación de Amazon, que en plena pandemia inició las obras para su ubicación en Bobes, incorporando efectos tractores que, sin duda, verificará el transcurso del tiempo.

Siero, en definitiva, se proyecta como un compendio de razones y argumentos para constituirse en una alternativa idónea para desarrollar un proyecto vital plenamente satisfactorio, conjugando calidad de vida y empleo, tal y como pretende explicar, con acierto, el reclamo publicitario ideado recientemente por el propio Ayuntamiento: Siero, un lugar para vivir y para invertir.

Quienes vivimos aquí lo sabemos muy bien. Con su nueva edición local, LA NUEVA ESPAÑA demuestra que lo ha sabido comprender a la perfección.