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Un asturiano en la cima "booktuber"

El ovetense Sebastián G. Mouret gana el premio de la Feria del Libro de Madrid por su fomento de la lectura en el entorno digital

Sebastián G. Mouret.

Ya no son una moda. Son un modo de acercarse a la literatura y divulgarla a través de canales de vídeo con un estilo desenfadado que conecta con los lectores más jóvenes. En una palabra: "booktubers". Y el asturiano Sebastián G. Mouret (Oviedo, 1996) es uno de sus estrellas, como ha certificado la feria de Libro de Madrid con el premio "Samsung Lectores de Hoy" por su contribución al fomento de la lectura vinculado con el entorno digital. Hace cuatro años, con la cámara de un teléfono móvil y una torre de libros como trípode empezó a hablar de libros. Así nació "El coleccionista de mundos".

No son salvadores de la patria libresca: "No creo que los 'booktubers' salven al libro, porque no creo que el libro esté en peligro. Pero sí que es cierto que la opinión de los 'booktubers' cada vez está más presente en el mundo editorial, y por parte de los lectores. Lo cual, a mí personalmente, me llena de orgullo".

Ojo: lo que hacen no es crítica: "Los 'booktubers' no tienen aspiración a ser críticos. Simplemente comparten sus opiniones literarias en internet, para quien quiera escucharlas. Como lo haría un amigo, un cuñado o un compañero de trabajo, que viene y nos recomiendan un libro. Ser crítico literario, son palabras mayores. Se necesita una formación y una profesionalidad extra".

Con el éxito llegan a veces ofertas "tentadoras" de algunas editoriales: "Sí, lo han hecho. Y bajo ningún concepto he aceptado, pues la credibilidad es algo muy importante para mí. Otra cosa son campañas con productoras de cine u otras marcas, con las que sí que hemos colaborado. Pero en lo que se refiere a hablar bien o mal de un libro, yo al menos, no acepto pagos".

Duda: ¿esto es una moda o un primer capítulo? "Sólo el tiempo puede responder a esa pregunta. Tal vez a Youtube le toque reinventarse con el tiempo, pero yo creo que no es algo tan pasajero como se pinta".

No hay problema en comentar una novela de... por ejemplo, ¿Vargas Llosa? "Concretamente de él no he disfrutado demasiado de las obras que he leído. Pero si de atrevimiento se trata, en mi canal se puede encontrar todo tipo de autores, de todo tipo de épocas y temáticas. No se trata de valentía, simplemente de que esa obra consiga llamarme la atención o no".

No sabe si se puede hablar de éxito en su caso pero "sin duda hay una cercanía con el público, y un lenguaje más cercano, que han ayudado a afianzar un público que quería hablar de libros, de tú a tú". Que un comentarista de libros sea fenómeno fan (18.000 seguidores en Facebook) es insólito. "Que un movimiento literario llegue a tanta gente es algo extraordinario. De hecho Facebook es la red social que menos audiencia junta: somos más de 50.000 en Instagram, 47.000 en Twitter y 160.000 en Youtube. Pero no siento presión. Puede que en ocasiones la demanda de contenido se haga estresante, o el deseo de sacar vídeos de calidad, pero tampoco es algo que me quite el sueño. Confío en mi capacidad creativa.

Solamente hace reseñas positivas de libros. Por varios motivos: "El primero es una falta de tiempo: se publican miles de libros anualmente, pero el año tiene un número contado de semanas, y no me apetece perder el tiempo haciendo una crítica negativa, cuando podría recomendar otra obra. Y el segundo es que no creo que sea yo nadie, para decirle a otra persona 'no leas este libro'. Al final se trata de fomentar literatura".

Se define más bien como creador de contenidos para internet pero no porque el campo "bootuber" le quede pequeño. Y es que "booktuber" es "un mero término para separar, dentro de Youtube, a la gente que habla de literatura, de aquellos que tocan otros campos (maquillaje, tecnología, videojuegos?) por lo tanto no creo que a nadie le 'quede pequeño' o grande. No es una cuestión de número de visitas o audiencia: sencillamente, si hablas de libros, ya eres booktuber. Si me defino como 'creador de contenido', es porque yo me muestro en internet en muchas más facetas que como 'booktuber', y creo que este término lo engloba de una mejor manera".

¿Tendría éxito un programa de libros con esta fórmula en la tele visión o es hijo de su medio? "Todo depende de cómo se enfoque, pero el público televisivo es muy distinto al de internet. El público de internet no se adapta a horarios, pausas para publicidad, o la inmaculada perfección televisiva, que a veces resta cercanía con la audiencia. Pero, evidentemente, todo podría resultar si se hace de la manera adecuada".

No tiene sentido preguntarse si el "booktuber" se nace o se hace porque ese término "tan solo hace referencia a una persona que crea contenido literario en Youtube. Por lo tanto no es una cuestión de 'nacer' o 'hacerse'. Cualquiera puede coger una cámara, grabarse hablando de un libro, y subirlo a la red. No se necesita más que eso".

Mouret, que afirma que "actualmente no se puede vivir de ser 'booktuber', dedica bastantes horas a serlo, "no puedo dar una cifra aproximada pero todo mi día gira en torno a la creación de contenidos en internet".

He aquí su método de trabajo: "Yo, de normal, soy un apasionado lector. Así pues, de entre todas mis lecturas, suelo seleccionar una (por el motivo que sea, pero en sí porque me ha gustado). Dependiendo de la lectura puedo tener la estructura del vídeo más o menos clara, y en ocasiones tomo unas pocas notas para no olvidar algunos puntos importantes de los que quiero hablar. Después me grabo, edito ese vídeo, y lo subo a Youtube. Es un proceso largo, pero uno se va haciendo y cogiendo rapidez".

Si se busca su nombre en Facebook salen varios perfiles, más Twitter, más Youtube, más páginas personales, más Instagram, más? Todo un "coleccionista de mundos" virtuales. "En Facebook concretamente varios "fans" -aunque no me gusta emplear ese término- me han creado varias páginas falsas y clubs de fans, pero en lo que a mí respecta solo tengo una cuenta en cada red social. Pero sí, me gusta estar en todas partes, porque disfruto de internet en todas sus facetas".

Supongamos que un joven de 18 años amante de la lectura quiere ser como usted... "Pues le diría que pare. Le diría que querer ser como otra persona no tiene ningún sentido, porque yo ya existo, y lo que el mundo desea ver no es otro yo, y si no a usted. Le diría que descubriese sus puntos fuertes y que los desarrollase. Y que, si quiere comenzar a hablar en internet y crear (como yo) su propio rincón de opinión (ya sea sobre libros o cualquier otra temática), que lo haga porque realmente lo disfruta".

-Plan para hoy pero... ¿se ve haciendo lo mismo con 30 años?

-Me encantaría.

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