El Papa Francisco hizo ayer desde Azerbaiyán un llamamiento para que las religiones sean "caminos de encuentro y reconciliación" y advirtió de que "Dios no puede justificar forma alguna de fundamentalismo". Francisco llegó a Azerbaiyán, tras dos días en Georgia, y se reunió con el líder de los musulmanes del Cáucaso, Allahshukur Pashazadeh, y después celebró un encuentro interreligioso con el jeque, ortodoxos y judíos. El Papa Francisco afirmó que "Dios no puede ser invocado por intereses partidistas y fines egoístas, no puede justificar forma alguna de fundamentalismo, imperialismo o colonialismo".