Enrico Clementi es el cuarto doctor honoris causa del mandato de Santiago García Granda en la Universidad de Oviedo. Mañana recibirá los honores que le concede esta distinción en una ceremonia que comienza a las doce de la mañana. Hoy mismo, antes del ensayo del acto solemne, participará en un seminario con estudiantes de Química donde cuenta como discípulos con el profesor José Ángel Sordo, que ejercerá como padrino del honoris causa.
-¿Qué diferencia a la química teórica de la computacional?
-La química teórica se basa en un conjunto de ecuaciones que constituyen la base de la Teoría Cuántica. Desafortunadamente, las soluciones a todos los desarrollos teóricos eran inviables -debido a la complejidad matemática-, para sistemas triviales como los átomos de hidrógeno y helio y la molécula de hidrógeno H2. La situación comenzó a cambiar con la llegada de las computadoras electrónicas y con la codificación de programas informáticos capaces de resolver problemas, de simple a complejo, requiriendo el desarrollo teórico anterior, la tarea de Química Computacional. Además, muchos problemas químicos clásicos, como la determinación de la estructura molecular, la unión molecular, la estabilidad, las reacciones químicas, la espectroscopia, la termodinámica, etcétera fueron, desde el principio, considerados problemas de la química computacional.
-¿Qué han supuesto el establecimiento de la Química Computacional que nació fruto de sus investigaciones?
-Cuando empecé mi investigación, al final de la década de los cincuenta, muy pocas universidades tenían computadoras o personas capaces de usar computadoras y escribir programas informáticos. Seleccioné, como mi misión, cambiar esta situación introduciendo el uso de computadoras en el ámbito académico y de investigación. Por esta razón, he puesto a disposición de alrededor de 200 universidades o institutos de investigación en todo el mundo, una gran biblioteca de programas informáticos que ayudarían a la introducción de la Química Computacional en las instituciones. Esta tarea requirió que mi grupo de investigadores escribiera muchos programas informáticos, proporcionara ejemplos de aplicabilidad de los programas, y acogiera a investigadores de muchos países para aprender y contribuir al desarrollo.
-En su laboratorio se han formado numerosos investigadores , ¿de quienes guarda más grato recuerdo?
-Mis colaboradores tenían un puesto permanente o visitaban científicos, generalmente por al menos un año. Todavía tengo relación con ellos, ya que los consideraba no sólo colaboradores competentes, sino amigos compartiendo el mismo objetivo. De hecho, en varias ocasiones, ellos me enviaron, para ser entrenados, a sus mejores estudiantes.
-¿Cuál es su vinculación con la Universidad de Oviedo?
-José Ángel Sordo (catedrático de Química Física) es un ejemplo de los excelentes colaboradores que mencionaba. Tuve un buen número de colaboradores españoles, algunos de ellos relacionados con la Universidad de Oviedo, pero ahora están en otras universidades españolas.
-¿Qué opina de la Ciencia que se hace hoy en Europa?
-Tengo la sensación de que hoy en día la Ciencia en Europa es débil en el tratamiento de problemas básicos a largo plazo. Por ejemplo, Europa no cuenta con un número suficiente de expertos con una amplia visión científica a nivel gubernamental. Otro ejemplo es la falta de enseñanza regular de la codificación de computadoras a partir de la escuela primaria. La inteligencia artificial se difunde cada vez más en las aplicaciones pero no es suficientemente valorada en el nivel básico. En general, la Ciencia se utiliza, en el mejor de los casos, principalmente para ayudar a la producción de bienes no como un valor en sí mismo.
-¿Los investigadores de hoy tienen menos posibilidades para escalar posiciones en la Ciencia?
-Nuestra sociedad valora el poder financiero y no el conocimiento científico. Dedica fondos insuficientes a la investigación fundamental y el número de puestos disponibles para ciencia pura es muy limitado.
-Decía el nieto de Marie Curie, de visita hace unos días en Asturias, que a determinada edad no conviene eternizarse en puestos de gestión o de responsabilidad, ¿está de acuerdo?
-La energía, la competencia, la preparación, el interés... evolucionan durante el tiempo de vida de una persona. Pienso que una persona debería dar, no sólo recibir de la sociedad. Las posiciones administrativas requieren "mens sana in corpore sano", sin embargo la creatividad es bastante independiente de la salud, la edad y el estatus social.
-¿Cuál era su candidato para el Nobel de Química?
-Hace años estaba en un grupo de investigadores asesorando al Comité Nobel de Química. Pero renuncié ya que tenía la sensación de que las presiones políticas y financieras estaban influyendo en el proceso. Equivocadamente, la historia nos dice que no es necesariamente el mejor candidato el que gana una elección presidencial o se convierte en primer ministro.