La ministra en funciones para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, visitó ayer la cumbre del clima. Ribera se refirió a las comunidades autónomas españolas que, como Asturias, temen el cierre de centrales térmicas y reconoció que la transición en esas zonas "no es posible de la noche a la mañana", ya que debe generar empleo "en zonas que no han tenido la oportunidad de construir un modelo industrial alternativo". Por este motivo, la ministra señaló que "combinando esfuerzos es mucho más fácil". Ribera aseguró que está colaborando con los gobiernos de Asturias, Castilla y León, Aragón y Galicia. "A veces uno siente la desesperación de ver cerca cambios para los que no está preparado", ha lamentado Ribera, pero "hay que tener perspectiva, ya que una transformación tan profunda no se puede hacer en tan poco tiempo".