El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, interrumpió ayer su cuarentena para participar en el Consejo de Ministros extraordinario que decretó el estado de alarma por el coronavirus. Iglesias se hallaba en situación de confinamiento domiciliario por estar en contacto con su pareja, la ministra de Igualdad, Irene Montero, quien dio positivo tras participar en las manifestaciones del Día de la Mujer. Fuentes de la vicepresidencia de Derechos Sociales explicaron que finalmente no fue habilitada la asistencia telemática para la reunión de ayer. Por ello, dada su relevancia, el líder de Podemos acudió a la misma siguiendo "un protocolo sanitario".