Madrid / Oviedo

El PP se hizo eco ayer de una grave acusación contra el Gobierno a propósito de la información facilitada a los ciudadanos sobre los riesgos del coronavirus y sobre las medidas de protección que debían tomarse. Los populares emplazaron al jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, a explicar cuanto antes si el Gobierno alertó a su personal de esos riesgos una semana antes de avisar a toda la población, ya que, a su entender, sería de "una gravedad extrema" que se hubieran tomado "precauciones" dentro del Ejecutivo mientras se decía al resto de los españoles que siguieran haciendo una vida normal.

Desde el 3 de marzo, ministerios y demás departamentos públicos habrían empezado a recibir una circular con pautas de distanciamiento, teletrabajo e higiene para que sus trabajadores evitaran contagios. En esos momentos, el Gobierno todavía no había hecho ninguna recomendación a la ciudadanía, según informó ayer el diario gratuito "20 minutos".

El ministro de Sanidad, Salvador Illa, fue preguntado ayer al respecto en la primera rueda de prensa desde la declaración del estado de alarma que ha incluido preguntas en directo de los periodistas. Sin embargo, Illa dejó la pregunta no filtrada sin respuesta.

El líder del PP, Pablo Casado, mantuvo ayer una reunión telemática con los diputados, senadores y eurodiputados populares y en ella aseguró que su partido apoyará el jueves en el Congreso la segunda prórroga del estado de alarma, hasta el próximo día 26, siempre que esta no incluya "más limitaciones" a los movimientos y a las actividades económicas que las recogidas en el primer decreto.

De este modo, Casado exige que Sánchez cumpla su compromiso de que la suspensión de todas las actividades no esenciales decaerá pasado mañana, jueves, tal y como aseguró al anunciar estas nuevas restricciones el pasado 27 de marzo. En la práctica, esto significaría que numerosas empresas reanudarían su actividad el lunes, día 13, tras el paréntesis festivo del Viernes Santo y el fin de semana.

Casado expuso una segunda condición para respaldar la prórroga: recuperar el control al Gobierno por parte del Parlamento. "No podremos apoyar más al Gobierno a partir de ahora si no se recuperan esos controles", advirtió, antes de añadir que "la democracia no se puede confinar".

"Un Gobierno con competencias extraordinarias debe tener al menos un control ordinario", consideró Casado, en alusión a la actividad del Congreso y el Senado, que, dijo, no pueden estar en "cuarentena".

El tercer grupo más nutrido del Congreso, Vox, anunció que no apoyará la prórroga del estado de alarma mientras no se produzca la dimisión en bloque del Gobierno, aunque no anticipó si votará en contra o se abstendrá. El PNV votará a favor de la prórroga pero se abstendrá en la convalidación del decreto de medidas para la paralización de la actividad económica no esencial.

En efecto, además, de la prórroga del estado de alarma, el Congreso de los Diputados tendrá que pronunciarse pasado mañana, jueves, sobre la convalidación o derogación de los cuatro últimos decretos leyes aprobados por el Gobierno, esto es, los relativos a la prohibición de los despidos, la paralización de la actividad económica no esencial, el plan de ayudas para el alquiler y el refuerzo de la protección a las víctimas de la violencia de género.