"No es el momento de hacer grandes negocios, salvo quizá algunos sectores, pero sí es momento de tener que ayudar entre todos al sistema. En otras cosas, porque lo peor puede estar aún por llegar". Los cocineros y empresarios hosteleros José Andrés, que dirige y supervisa varios restaurantes en Estados Unidos, y Pedro Morán, dueño de Casa Gerardo, llegaron a esa conclusión esta tarde en la segunda entrega de "Diálogos para la reconstrucción", un ciclo de conferencias online organizadas por LA NUEVA ESPAÑA con el patrocinio del Banco Sabadell-Herrero y la colaboración de Bayer, la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), las Cámaras de Comercio de Asturias y Fuensanta. "Comer bien es salud", ese es el título de la segunda entrega que ha sido seguida por numerosos usuarios de LA NUEVA ESPAÑA y moderado por la redactora del periódico Elena Vélez, con el objetivo de acompañar e iluminar a los lectores en otros aspectos de la desescalada.

"Intento seguir lo que sucede en Asturias y lo que pasa en España lo más cerca posible, pero también estoy metido en esta locura de Estados Unidos", dijo José Andrés, que está desplegando iniciativas muy activas durante la crisis llevando alimentos a los que más lo necesitan. "Estoy muy orgulloso de lo bien que lo han hecho los asturianos. La región puede estar orgullosa de lo bien que ha gestionado esta pandemia en comparación a otros rincones del mundo", recalcó el chef asturiano afincado en Estados Unidos.

Una vez metido en faena, José Andrés lanzó algunos consejos en relación a la nutrición durante la pandemia. "Soy cocinero, tengo sobrepeso y no tengo conocimiento profundo en nutrición. Pero se puede seguir una lógica sobre cómo comportarse en una cocina. La dieta más equilibrada es aquella en la que no se cometen excesos", dijo José Andrés con ironía.

Pedro Morán abrió su turno realizando un balance de la situación de la hostelería en España y se mostró bastante crítico respecto a las futuras ayudas al sector. "Los cocineros nacimos para satisfacer al estómago. Pero, todo lo que está ocurriendo, está demostrando la fragilidad que tenemos. Estamos muy avanzados en tecnología, pero somos frágiles y nos ha pillado este bicho, que es una desgracia", indicó, aprovechando también para poner al día a José Andrés sobre la región: "en Asturias estamos bien, pero dentro de lo que está España, que vive un momento complicado. No tenemos protocolos que nos arrojen luz sobre cómo dedemos reabrir en el sector, José. Hay muchos problemas. La hostelería es uno de los grandes fuertes que tiene este país y creo que no se mira para nosotros. Tienen que atendernos un poco más. Tengo a mi gente en ERTE y gracias a ellos estamos ahí. Y mucha gente está sin cobrar, ¿qué pasa con ellos? Señores, vamos a ponernos las pilas. Estoy seguro de que los cocineros vamos a echar el resto, pero que cuenten un poco con nosotros", dijo rotundo. "No es el momento de la creatividad en la cocina, tenemos que ser gestores. Si no echamos números vamos a tener que llamar a José Andrés para que mande a su gente y nos dé de comer", recalcó

José Andrés recogió el guante y habló sobre la pandemia. "En todos los países del mundo se ha politizado la gestión, no tenemos líderes que trabajen al unísono. La falta de liderazgo, en muchos países del mundo, es que no se explican las decisiones. Bill Gates, también Obama, nos avisaron de la pandemia y no nos pilló preparados. Yo decidí cerrar mis restaurantes de los primeros. ¿Por qué? Porque veníamos de Japón, de ayudar al Gobierno en dar de comer a 6.000 viajeros de un crucero que no podían desembarcar y vimos lo que poía llegar a ocurrir. Dimos 18.000 comidas al día y me volví a EEUU con mucha conciencia de que esto nos tocaría duro y me puse rápidamente con el traje de pensar sobre lo que estaba pasando y no nos estaban contando. Así que cerré mis restaurantes, por proteger a mis empleados, y también por proteger a mi ciudad, Washington. No nos queda más remedio que cerrar, pero cuando volvamos necesitaremos un liderazgo para tomar las decisiones, siempre basadas en los expertos de sanidad", aseguró.

Para el chef astur-americano lo que está claro es que "hay tres crisis: la de salud, la económica y la humanitaria, y las dos últimas se solventarán cuando se solvente la primera". Y esa parte de la crisis sanitaria, según cree José Andrés, tiene aún muchos flecos pendientes. "Estamos fallando en varios movimientos, ¿cómo es posible que los sanitarios no tengan material para protegerse? Es como si a un cocinero lo pones a trabajar sin mandil o sin sartenes", se preguntó José Andrés. "Tenemos que atajar la crisis sanitaria, demos los equipos a los médicos para afrontar la situación. Hay que hacer las cosas como dios manda y hasta que nos solventemos esto no podremos abrir, porque si abrimos mañana nuestro personal tendrá problemas. Hay que abrir con conciencia, con planes, con creatividad: habrá que sacar los negocios a la calle y no bajar la guardia en la protección. Y, también, tenemos que pensar en formas creativas de aquí a un año, porque esto no se irá. No es momento de grandes negocios, tenemos prepararnos para lo peor, que a nivel económico igual no ha llegado. Tenemos que ayudar entre todos al sistema", indicó José Andrés

"Estoy contigo, pero que cuenten con nosotros, José", insistió Pedro Morán, que reclamó planes especiales para la hostelería y el turismo en la proporción en que esos sectores contribuyen al PIB de España.

Pero ante esa reclamación de los hosteleros españoles José Andrés pidió una actitud proactiva y de anticipación. "Tenemos que convertirnos en una sola voz y traer planes, ideas y demostar que estamos todos unidos. ¿Qué le vamos a pedir al Gobierno central? Cuando no te llaman hay que tocar la puerta. En América estamos activos con los senadores, con los congresistas, ahora hay una ley, que esperemos que se apruebe, para ayudar a los pequeños restaurantes", respondió José Andrés, quien también advirtió que no se trata solo de pedir, sino también de dar. "Los restaurantes de España también deben formar parte del entramado de ayuda humanitaria. Y si no es el momento de hacer grandes negocios, que no lo sea. Pero no puede ser que hay gente pasando hambre en España con la gran red hostelera que existe".

Ya metidos en otros debates, ambos chefs opinaron sobre cómo va cambiar esta pandemia algunos hábitos en el mundo. Y se abrieron dos melones: el de las habilidades para cocinar y el de cómo se va a consumir la sidra.

Respecto a la cocina en casa, Pedro Morán aseguró que "puede ser una de las cosas buenas que saquemos de todo esto. Que la gente se ha apuntado a cocinar y eso es buenísimo para nosotros y para nuestros restaurantes porque nos analizarán con más criterio".

Respecto al consumo de sidra y cómo impactará en nuestra cultura la norma de distanciamiento social, José Andrés manifestó que "puede suponer un cambio momentáneo pero no creo que se llevé más allá". Y pidió que no se vea como un drama "que en vez de compartir un vaso o una botella, pasemos a tomar sidra con un vaso por persona o por unidad familiar. Son pequeños ajustes adaptativos que tenemos que hacer en estos tiempos, pero que tienen solución", comentó, "tampoco es tan complicado". Morán apuntó, sin embargo, a la repercusión que puede tener en el concepto del escanciado y la figura del escanciador. José Andrés hizo un elogio encendido del escanciador y auguró que "igual valoraremos más su trabajo a partir de ahora".

Finalmente, en la exposición sobre qué puede traer de positivo la era postcovid, José Andrés apeló a que sirva para que "salga de aquí una gran explosión de empatía y que no nos pille como sociedad pensando en construir muros sino en construir mesas más largas para todo el mundo. Es una gran oportunidad para reinventar el mundo. Vamos a salir mucho más reforzados y quizá seamos un sociedad más comprensiva con el que piensa otra cosa porque las visiones diferentes pueden enriquecer nuestra línea de acción y de pensamiento". Y respecto a la hostelería en España, tanto Morán como José Andrés reivindicaron una economía española "donde el turismo, y eso es también la gastronomía, vuelva al cien por ciento, siendo como ha sido un sector de gran riqueza. No va a ser fácil pero tenemos que trabajar por ello".