La Consejería de Educación publicó ayer una serie de instrucciones actualizadas que regulan y ordenan el funcionamiento de las aulas abiertas, las unidades creadas en centros ordinarios para alumnado diagnosticado con trastorno del espectro autista, que necesita adaptaciones y que ocupa parte del horario trabajando con especialistas en un grupo reducido, en cuyos espacios se prepara la transición progresiva a una clase ordinaria.

La red pública cuenta en la actualidad con 22 aulas abiertas en diez concejos, dado que a las 21 anunciadas a finales del curso pasado se ha sumado una más en el Colegio Público Colloto, de Oviedo. Las instrucciones elaboradas por Educación explican que estas unidades favorecen una intervención personalizada, para facilitar la adaptación del currículo y utilizar metodologías específicas, garantizando la calidad de la atención educativa.

Las aulas abiertas, que se pusieron en marcha en Asturias en el curso 2016-2017, hace ahora seis años, están destinadas a alumnado de segundo ciclo de Infantil y de Primaria, a propuesta del servicio de orientación, que debe elaborar un informe psicopedagógico previo.

Con carácter general, están previstas para atender a un grupo de tres a cinco estudiantes, y de manera excepcional y por razones debidamente justificadas, se podrá escolarizar a un número menor de tres y a un máximo de seis. Las aulas abiertas estarán a cargo de profesorado del cuerpo de maestros de las áreas de Audición y Lenguaje y de Pedagogía Terapéutica, cuyos especialistas también deberán impartir formación específica al resto del profesorado, ya que las instrucciones hacen especial hincapié en la necesidad de intensificar la coordinación.

Al mismo tiempo, tendrán que asesorar al resto del personal docente y no docente del centro para apoyar a este alumnado en contextos como el patio, el comedor, la biblioteca o los aseos.

Algunos sindicatos y trabajadores de estas aulas abiertas mostraron su malestar porque, criticaron, estas instrucciones salen a la luz sin ninguna consulta previa y porque se aumenta el ratio por aula de los alumnos, que pasa de cinco a seis.