La Princesa de Asturias llevó el pasado viernes carbón en sus orejas. El presidente del Principado, Adrián Barbón, regaló tanto a Leonor como a la Infanta Sofía unos pendientes con una gargantilla a juego, obra de la joyería de Alfredo Asensio y Marta Baquero en Turón. La peculiaridad de estos artesanos es que sustituyen las perlas o los diamantes por trozos de carbón que recogen ellos mismos en Turón (Mieres). La heredera de la Corona lució este diseño en las audiencias del hotel de la Reconquista. Llegó con unos pendientes brillantes, que acabó sustituyendo a lo largo de la mañana por otros de sello asturiano.
"Hasta el final no nos dijeron para quiénes eran. Y cuando lo supimos nos llevamos una gran sorpresa", cuenta Marta Baquero, copropietaria del negocio. En concreto, los pendientes son dos aros, que imitan "a las ruedas que tiran de los carros en las minas", y en el interior de uno de ellos está el carbón. "La gargantilla es igual y del mismo tamaño, con una cadena muy fina de plata", apunta. El paquete que le entregaron a la Princesa también llevaba unas flores (las que aparecen en la foto) recogidas en la playa de Los Quebrantos, en San Juan de La Arena. Hasta hoy, los joyeros de Turón no habían visto ninguna fotografía de Leonor con su creación, lo cual les puso "contentísimos".
Precisamente hoy la Princesa cumple 17 años en familia. El calendario académico de su colegio en Gales, el "UWC Atlantic College, contempla un pequeño periodo vacacional, conocido como "October break", y estará en España hasta el 6 de noviembre. Su próximo cumpleaños, el número 18, estará marcado de retos. Uno de ellos: presidir en solitario, en octubre de 2024 en el teatro Campoamor de Oviedo, los galardones que llevan su nombre. Este último punto no ha sido confirmado por la Casa del Rey, pero todo apunta a que será así. Hasta ahora, Leonor ha seguido a rajatabla la senda marcada por su padre. Leyó su primer discurso a los 13 años, como Felipe VI, y realizó su primer acto en solitario a los 15, a la misma edad que el monarca. El actual Rey presidió por primera vez, sin Juan Carlos I, los premios "Príncipe de Asturias" en 1986 a los 18 años.
Leonor sufrió la noche del viernes una indisposición que le obligó a abandonar, tras muchos esfuerzos y con gran profesionalidad, su visita al "Pueblo ejemplar" de Cadavedo. Su hermana, la Infanta Sofía, no pudo directamente acudir a la parroquia valdesana por la misma dolencia. De momento, no ha trascendido ninguna información más sobre sus estados de salud.
