El Almería, próximo rival del Sporting, tiene músculo financiero. El conjunto andaluz es uno de los más activos en el mercado de fichajes, tras haber realizado siete incorporaciones. La última se produjo ayer, tras hacerse con los servicios de Lucas Robertone, un centrocampista procedente de Vélez Sarsfield por el que ha desembolsado 3,4 millones de euros, la mitad de sus derechos, puesto que el argentino está tasado en 6,5 millones de euros. Además, según el conjunto de Buenos Aires, el Almería deberá abonar otro 30 por ciento de los derechos del futbolista, que firma por cinco temporadas.
Mucho ha cambiado el Almería desde la llegada del jeque Turki Al-Sheikh. Un propietario que ya protagonizó movimientos curiosos el pasado curso, cuando fichó al exjugador del Real Madrid, José María Gutiérrez Guti, para el banquillo. Eso sí, el madridista no terminó la temporada ya que fue despedido en junio, tras perder el Almería con Alcorcón. En ese momento, el conjunto rojiblanco era tercero y estaba a cinco puntos del ascenso directo. Tras haber realizado un considerable desembolso económico, el Almería no logró su objetivo de subir a Primera División. Fue eliminado a las primeras de cambio por el Girona.
Ese desengaño no parece haber hecho mella en el poderío económico de la entidad almeriense. Ayer cerró el fichaje de Robertone, un futbolista que tuvo ofertas para jugar esta temporada en Primera División. El argentino es el séptimo fichaje del Almería en lo que va de mercado. El club fichó antes a Aketxe, Samu, Costa, Morlanes Gutiérrez y Carvalho. Y mantiene en su plantilla a algunos futbolistas con gran postín y futuro prometedor. Es el caso de Arvin Appiah, un joven delantero procedente del fútbol inglés por el que el jeque pagó 8,8 millones de euros.
El Almería espera que los refuerzos le valgan para retornar a la élite. En su debut, se impusieron al Lugo (0-2). Y ahora tendrán delante al líder, el Sporting, que visita Los Juegos del Mediterráneo pasado mañana a las 18.15 horas.
