Le pasó otra vez al Sporting esta temporada. El derbi fue el primer tropiezo. A esa derrota ante el Oviedo le sucedieron el empate ante el Tenerife y la derrota ante el Málaga. Y con la Ponferradina corrigió ese bache el Sporting. Ahora sucedió lo mismo, con tres jornadas que llevaban los de David Gallego sin vencer, apareció entonces un partido de oficio, muy serio y con acierto, que provocó que el bache no se volviera a alargar. Recupera el conjunto rojiblanco la buena dinámica con un triunfo convincente, de nuevo en casa, donde el equipo está invicto, y frente a un rival de la zona baja que plantó batalla y que obligó al Sporting a exprimirse al máximo tras recibir el tanto del empate. Son ya 27 puntos los que lleva el equipo gijonés cuando van 14 jornadas, lo que supone superar el registro de toda la primera vuelta del curso pasado, con siete partidos menos. Camina con paso firme el Sporting, sumando puntos, manteniendo sus buenas sensaciones, con un once base en el que, salvo un par de efectivos que varían por algún momento, ya se conoce de memoria. Y con esa sensación de que el momento siempre aparecer. El empate del Sabadell llegó en un momento de relajación del Sporting, al que le cuesta mucho cerrar los partidos este año. Ese aviso del gol le hizo reaccionar. Transmitía el equipo que alguna ocasión iba a tener. Y llegó rápido. Otro triunfo más. Y ya van ocho.
El calendario se aprieta pero gallego repite alineación
Había dudas de si podía introducir alguna modificación para oxigenar al equipo. Pero el entrenador del Sporting decidió mantener su apuesta. Los mismos que jugaron ante el Mallorca repitieron de inicio. Ni Pelayo Suárez, ni Pablo García, ni Gaspar ni Cumic tuvieron su opción. Gallego dio continuidad. Y el equipo respondió. Encarriló muy pronto el partido en la primera mitad, aguantó, y supo reaccionar cuando sí que se notó que faltaba algo de aire al inicio del segundo periodo, momento en el que empató momentáneamente el Sabadell.
El Sabadell sigue atascado en El Molinón: 71 años de su último triunfo
Se medían los dos equipos con más participaciones en Segunda a lo largo de la historia. Un partido clásico que se volvía vivir cinco años después, momento en el que el Sporting subió a Primera. El Sabadell, que había experimentado una reacción, sucumbió en Gijón, en un estadio que no se le da nada bien. En Liga, el último triunfo del conjunto catalán se remonta al 30 de octubre de 1949, con un marcador de 1-3. Desde esa ocasión, en El Molinón, 14 victorias a favor del Sporting y apenas dos empates para el Sabadell. La racha sigue para los rojiblancos ante un rival que se le da bien. Y de esta manera también completan el círculo los de David Gallego. El Sabadell, el recién ascendido al que le quedaba por medirse, también cayó derrotado ante el Sporting, como antes hicieron Logroñés, Cartagena y Castellón.
Aitor, goleador y enfado
El “pishihi” del curso pasado del Sporting tuvo que esperar esta temporada hasta jornada decimocuarta para inaugurar su cuenta goleadora. Llegó el tanto de Aitor al poco de empezar. Y en la segunda mitad, tras empatar el Sabadell, Gallego decidió cambiarle. El onubense se fue enfadado. “Para las malas lenguas, salgo enfadado del campo por el empate, no por el cambio. Somos un equipo, vamos todos una”, destacó en sus redes sociales. Con Aitor y Gaspar ya son ocho los futbolistas rojiblancos que han logrado marcar este curso. Sigue al frente Djuka, con seis tantos. Dos nuevos jugadores se sumaron a la causa de reforzar el apartado ofensivo y goleador. Algo muy necesario para un equipo que ha pasado de hacer un gol en tres jornadas, a conseguir tres en solo una.
Otro cambio acertado de Gallego: Gaspar, estreno goleador por partida doble
Tras el gol de empate del Sabadell, a David Gallego no le tembló el pulso. Retiró del campo a Aitor García, autor el gol del Sporting, para dar entrada a Gaspar Campos. La decisión fue discutida por el onubense, pero el cambio le volvió a funcionar a Gallego. Gaspar, en uno de los primeros balones que tocó, regateó a un rival, busca la entrada al área, y batió al meta de Sabadell con un zurdazo. Es cierto que la fortuna le sonrió, porque al meta se le escapó el balón, y pudo hacer más. Pero la reacción buscada por Gallego apareció y Gaspar Campos se estrenó como goleador con el Sporting. Lo hizo además por partida doble, porque después una acción técnica, combinó con Pedro Díaz, y acabó logrando el tercer tanto para el Sporting y el segundo en su cuenta particular. Otra vez David Gallego supo leer el partido y encontrar la tecla para la reacción de su equipo.