Oviedo, Idoya RONZÓN
El Tribunal Supremo ha confirmado la condena de dos años de prisión y el pago de una multa de dos millones de euros para el allerano Francisco Miranda Velasco por un alijo de doce toneladas y media de hachís dirigido por el capo gallego Laureano Oubiña e interceptado en octubre de 1999 en el Atlántico a bordo del barco «Regina Maris. Además, aumenta de dos a tres años la pena a otro asturiano, Manuel Jesús Teleña de Poo, de Gijón, y mantiene la de otros dos gijoneses, Jesús Solar -cuatro años y dos millones- y Jorge Martínez Castañón, tres años y medio y dos millones.
El tribunal confirma también la condena de Laureano Oubiña, seis años y nueve meses de prisión y multa de 60 millones. En total, son 17 las personas condenadas, entre ellas David Pérez Lago (seis años y dos millones), hijo de la mujer de Oubiña, María Esther Lago, fallecida durante la instrucción del proceso.
Según la sentencia, Laureano Oubiña, su mujer y Pérez Lago «habían establecido un entramado organizativo dedicado a la importación a España de sustancias estupefacientes». La trama estaba «perfectamente jerarquizada», correspondiendo la «máxima decisión» a Oubiña, que determinaba «la forma y el modo de actuación». Al morir su esposa, David Pérez Lago asumió «mayor protagonismo» en la red.
«Persona de confianza»
El «Regina Maris» fue interceptado el 1 de octubre de 1999 cuando navegaba hacia el sur de las Canarias, con 12.559 kilos de hachís en 445 fardos, con un valor de 15,1 millones de euros. Según la Audiencia, Oubiña había previsto que el barco se dirigiera a Galicia, realizando dos alijos, uno en la zona de Finisterre y otro en la de Viveiro.
Cada uno de los condenados desempeñaba un papel específico, según la sentencia. Así, Francisco Miranda era una «persona de confianza» de Oubiña y titular del «Regina Maris». Jesús Solar «estaba destacado en África y se encargaba de los contactos precisos de la organización en relación con los barcos que Oubiña disponía en estos países». Además, recibía «a las personas enviadas desde España y aprovisionaba a ellas y a los barcos de lo que necesitasen». Jorge Martínez Castañón se encargaba de «agenciar a la red medios de transporte» para la droga, concretamente para llevarla del «Regina Maris» a la costa. Esto, según la sentencia, iba a hacerlo con la embarcación «Xarabal», propiedad de la esposa de Teleña de Poo.
