Son pequeños testigos de plástico pero representan un gran peligro. La Policía Nacional ha difundido hoy a través de las redes sociales una fotografía en la que se pueden ver las "marcas" que los ladrones dejan en las puertas de las viviendas que pretenden desvalijar. El objetivo de los "cacos" es comprobar si hay alguien dentro de esos inmuebles. Si horas después de colocar la pequeña pestaña de plástico regresan al piso y la "marca" no se ha movido quiere decir que tienen vía libre.

El "tuit" de la Policía hace referencia a ladrones que robaban en pisos de Madrid. Pero no son los únicos. En Asturias el año pasado se registró la presencia de bandas de ladrones que utilizaban estos mismos "chivatos" y otros "trucos" como poner vaselina en las mirillas de sus víctimas.