La Escuela del Deporte está de enhorabuena por dos motivos. Por un lado, la decisión del Principado de convertir el colegio Virgen de las Mareas en su nueva sede dentro de un año ha supuesto un balón de oxígeno para la comunidad educativa, asfixiada por la falta de espacio que ha padecido hasta ahora en La Magdalena. La Consejería acierta con esta ubicación porque las dependencias del Nodo están infrautilizadas y se encuentran a poca distancia de las estaciones de tren y autocar, una cercanía que agradecerán los alumnos que se desplazan a diario desde otros puntos de Asturias. Además, el centro ha conseguido poner de acuerdo a todos los grupos políticos de la ciudad para pedir un incremento de las titulaciones, aprovechando el ansiado traslado. Un primer paso para que Avilés se consolide, a falta de estudios universitarios, como el referente regional de este tipo de formación profesional, cada vez más demandada y prestigiada.
