¿Quién paga ahora la "casi boda" entre Juan Ortega y Carmen Otte?

¿Quién es el sacerdote que está detrás de la "espantá" de Juan Ortega?: el torero hizo una llamada antes del enlace

María González Falcó

La casi boda entre el torero Juan Ortega y la cardióloga Carmen Otte Alba ha dejado con la boca abierta a más de uno. Al menos, a los invitados. La sorprendente decisión de la figura taurina de dejar planta a su novia el día de su boda en plena iglesia ha sacudido a la familia de la médica, destrozada tras lo ocurrido y más triste aún dada la repercusión mediática de la fuga.

Pero, ¿quién paga ahora el frustrado enlace? La celebración para más de medio millar de invitados rondaba la escalofriante cifra de 70.000 euros, una cuantía económica que tendrá que asumir el torero para redimir, aunque solo en parte, el desaguisado.

La llamada

Pero, ¿qué pasó el sábado y con quién habló Juan Ortega antes de convertirse en un 'novio a la fuga'? Tal y como han revelado en 'Y ahora Sonsoles', el torero decidió hacer una llamada decisiva para transmitir sus dudas respecto a su boda.

Preocupado, y sin saber qué hacer ni si seguir adelante a pesar de no estar seguro, el sevillano -con fuertes convicciones religiosas- llamaba a un sacerdote amigo que había viajado desde Barcelona para oficiar su boda. Fue a él a quien le planteó sus dudas por teléfono, y el cura le aconsejó que si no tenía claro si quería casarse con Carmen, que no lo hiciese porque sería algo de lo que se arrepentiría.

Aunque se ha especulado con la existencia de terceras personas o incluso con una presunta infidelidad durante la despedida de soltera de la jerezana, nada que ver con la realidad. Si Juan Ortega decidió suspender su enlace minutos antes fue por sus propias dudas respecto a su relación.

Una decisión que comunicaba a su prometida, que estaba ultimando los preparativos de su look nupcial -en concreto maquillándose y peinándose para el que se suponía que iba a ser el día más feliz de su vida- por teléfono. Ella, como no podía ser de otro modo, se quedaba completamente en shock, sin creerse que su pareja desde hace 10 años la plantase en el altar a media hora de su boda.

Antes de coger su coche para regresar solo a su residencia en Sevilla -donde por cierto vivía con Carmen hace más de un año- Juan Ortega también telefoneaba a sus padres para decirles que no pensaba casarse. Y habrían sido ellos, y los padres de la doctora, los que habrían avisado a los 500 invitados, ya con todo listo para dirigirse a la iglesia, que no había boda.

Consecuencias económicas

Mientras Carmen se refugia en el domicilio de sus padres en Jerez de la Frontera y no deja de llorar por lo sucedido, su familia ha pasado a la acción y según 'YAS' han exigido al diestro que se haga cargo de todos los gastos que ha conllevado la boda que no llegó a celebrarse.

Un banquete en una exclusiva finca para 500 invitados, los trajes, la luna de miel, lo adornos florales de la iglesia y otro tipo de costes que sumarían en total cerca de 90.000 euros que tendrá que asumir Juan Ortega, incluyendo el vestido de la novia.