Todo tiene sentido: William Foster (Michael Douglas) se arma de valor y con pistolas cuando se da de bruces con la frustración más gigantesca. Foster es el protagonista de «Un día de furia», una tragedia ciudadana que Joel Schumacher dirigió en el año 1993, cuando Douglas vivía la gloria de los días posteriores al «Instinto básico» de perseguir a una asesina que cruza las piernas y farda con un picahielos. La frustración y la furia de Foster tienen casi veinte años, pero parece que el tiempo no cambia. La poetisa andaluza Sara Herrera Peralta presenta ahora «Shock» (Baile del Sol), su última colección de versos. La primera parte del libro se titula «El paro» y en ella escribe cosas como éstas: «Los anuncios clasificados / son como esquelas precedentes a la entrevista» o «La metafísica es un arma y un arte de batalla». Cuando llega la furia.
