Saltar en paracaídas supone abandonarse a la sensación de vértigo, dejando que la adrenalina recorra el cuerpo y que la mente vuele a cuatro mil metros de altura, aunque la cantidad de energía que se desprende de lanzarse al vacío no puede soportarla cualquiera. La caida libre, que comenzó siendo una práctica de carácter militar y posteriormente se convirtió en un deporte aéreo, tiene distintas modalidades.

Por ello, la Agrupación de veteranos paracaidistas de Asturias Agrupac-Astur, puso ayer en el Antiguo Instituto de Gijón dos tipos de paracaídas a disposición del público, pero bien sujetos a tierra firme. "La idea es que todo el que esté interesado pueda venir a probar los paracaídas, y ver así la diferencia entre uno de salto manual y otro de salto automático", explica José Luis Bericua, presidente de la asociación. Esta original iniciativa entra dentro de las actividades previas al Festival Aéreo, que celebrará su XI edición el próximo domingo 24 de julio a las 12.00 horas.

Dentro de estas actividades también se encuentra la conferencia "La evolución del paracaidismo". La charla tuvo lugar en la tarde de ayer, también en el Antiguo Instituto. "Hablamos sobre la evolución de los paracaídas a lo largo de la historia: formas, materiales, etc., pero también del material auxiliar que se necesita, como trajes o cascos", explica Fernando Sanz, conferenciante y comandante retirado de la brigada paracaidista. A pesar de ser una jornada muy calurosa, que invitaba más al baño que a otra cosa, fueron algunos los curiosos que se acercaron al patio del Antiguo Instituto para participar en la peculiar y curiosa inciativa, que empieza a caldear el ambiente para lo que vendrá el 24 de julio.

Y lo que se viene es, cuanto menos, inesperado. Este domingo, el A 400M, un avión de 45 metros de largo, irrumpirá en el cielo gijonés "gracias a la colaboración de "Airbus Military, quien enviará este gigantesco pájaro para disfrute de todos los aficionados a la aviación", según anuncian desde la organización. La novedad de presenta como una de las más importantes de los últimos años y hace que el undécimo Festival Aéreo se plantee como uno de los mejores desde sus inicios.

"Me parece tremendo ver un avión como el A400 en los cielos de Gijón" o "va a ser una gozada poder ver volar el A400" son algunos de los comentarios que ya están haciendo llegar a la organización, lo que demuestra la gran acogida que ha tenido esta noticia entre los aficionados a la aeronáutica. Una gran expectación que no para de crecer y que al fin se verá saciada este fin de semana.