Los shorts son una tendencia que se repite desde hace varias temporadas y este verano no será una excepción. La gran novedad es la prevalencia de la versión «vaquera» frente a otras opciones. Más de una puede tener la tentación de coger las tijeras y dar un buen corte a los viejos tejanos para darles un nuevo uso.

En esos casos hay que tener cuidado, porque el resultado no siempre es el esperado. Por eso merece la pena echar un vistazo a los escaparates y elegir una de esas prendas que se rentabilizarán este verano y probablemente los siguientes. Eso sí, cuanto más gastados y raídos parezcan mucho mejor.