Eran menores de edad cuando, la noche del 5 de marzo, apuñalaron y golpearon salvajemente a otro joven en las calles del barrio de Usera (Madrid). "Soy Trinitario, soy soldado juramentado", confesó uno de ellos, el que apuñaló dos veces a la víctima, que no pertenecía a ninguna banda.