En la iglesia de La Felguera acaban de colgar el cartel con el número 12. Son los días que dura el encierro de los autónomos que comenzaron la oleada de protestas en toda Asturias. "No teníamos otra alternativa, nuestra situación es desesperada", explican. Al otro lado de la verja el párroco de Laviana Luis José Fernández se interesa por su situación. "Es muy duro estar viviendo así", lamenta. En su iglesia otros seis autónomos iniciaron su encierro hace cinco días, el cansancio empieza a hacer mella y cada llamada de un familiar desata las emociones de todos: "Ánimo Adri estoy muy orgullosa de tí", exclama la hermana pequeña de Adriana Ferreira de 24 años. "Lo estamos pasando muy mal porque ya no hay dinero para pagar las facturas". La situación límite de muchas familias ha obligado a redoblar esfuerzos en la plataforma del Nalón. Cindy Mendoza gestiona las ayudas a través de los mensajes que recibe en su móvil: "Una chica me acaba de pedir galletas y leche porque no tiene nada para dar de comer a sus hijos. Yo reparto ayudas a mucha gente que lo necesita pero se avergüenza de su situación. Queremos trabajar pero nos están obligando a mendigar".