"La sonrisa más bonita", ha escrito la hija de Rocío Carrasco junto a un vídeo resumen de lo que ha sido el tratamiento del malagueño, quien no dudaba en colocarse unas carillas con las que ahora presume de dentadura perfecta. Aunque bien es cierto que el joven, de 24 años, no tenía una boca especialmente descuidada con este resultado se siente mucho más contento y seguro de sí mismo.