Kiko Hernández le ha declarado la guerra al chófer de María Teresa Campos, Gustavo Guillermo. Dispuesto a todo para demostrar que el fiel escudero de la veterana presentadora nada tiene de 'fiel' pero sí de 'traidor' y de 'topo', el colaborador se sometía este viernes al polígrafo. Muy serio, aunque con aspecto tranquilo, Gustavo ha reaparecido guardando silencio sobre las cosas que de él ha contado el colaborador.