Iñigo Onieva ha terminado su relación contractual con el Grupo Tatel, del que por cierto es accionista su futuro cuñado Enrique Iglesias junto a Rafa Nadal. Fuentes de su entorno sostienen que no ha sido despedido, tal y como adelantó en Sálvame. "En Tatel han redistribuido funciones a algunos de sus empleados, entre ellos Iñigo, y no han llegado a un acuerdo económico. Han cortado de buen grado". Iñigo seguirá siendo RRPP de la discoteca Lula, aunque ya no estará allí físicamente tantas noches para darle gusto a Tamara Falcó. Y a su vez, se embarcará en breve en un nuevo proyecto de hostelería "precioso" en el que está muy ilusionado. Este proyecto no se trata de la explotación hostelera del Palacio del Rincón, donde Tamara dijo que soñaba abrir un restaurante una vez ganó MasterChef.