La tragedia se posa en Oviedo. El corazón de Erika. Y. A., una adolescente de 14 años que vivía junto a sus dos hermanos mayores y sus padres en el cuarto piso del número 69 de la calle Vázquez de Mella, dejó de latir después de que supuestamente el vecino del 1ºE, un hombre de 31 años y origen moldavo, la abordara en las escaleras y la cosiera a puñaladas por causas que se desconocen. El varón, que ha sido detenido por un supuesto delito de homicidio, estaba siendo operado al cierre de esta edición en el HUCA por las heridas que se provocó a sí mismo asestándose decenas de puñaladas y cortes antes de entregarse a la Policía.