La Plaza de la Catedral de Oviedo ha reunido este lunes a centenares de personas que se han congregado para celebrar el Día Mundial de la Sidra con un escanciado simultáneo de esta bebida tradicional asturiana. El acto de conmemoración en Asturias del Día Mundial de la Sidra ha consistido en un escanciado simultáneo y la lectura de un manifiesto en el que se ha destacado que la sidra asturiana es un producto que "trasciende los valores propios del mercado" para conectar directamente con la identidad y cultura asturianas. "Esta bebida es una expresión viva de la cultura asturiana  que debe ser protegida como patrimonio cultural inmaterial",  destaca el manifiesto, que abunda en la faceta de la sidra como industria que "favorece el terruño, no se deslocaliza y da vida a los entornos rurales en riesgo de despoblarse".