"Orgulloso heredero de una historia centenaria, al minero padre, compañero, amigo, siempre comprometido, solidario en la desgracia". Es el texto que se lee en el pedestal del monumento al minero de Siero, ubicado en Carbayín Bajo, en la zona de la estación, y que homenajea a los trabajadores de las explotaciones que existieron en el municipio.

Carbayín Alto (parroquia de Santiago Arenas) y Carbayín Bajo (parroquia de Santa Marta Carbayín) cuentan con una gran tradición minera, cuyos inicios se remontan al siglo XVIII. En las inmediaciones de estas localidades aún se pueden contemplar los vestigios y castilletes de pozos como el de Pumarabule o Mosquitera, próximo ya a Langreo.

El monumento al minero se inauguró hace ya más de dos décadas, en diciembre de 2000, siendo alcalde el fallecido Juan José Corrales Montequín, y el grupo escultórico, formado por tres figuras de bronce, es obra de Fernando González Huergo.