Segundo intento de despegue de la nave SpaceX con la que se pretende que viajemos hasta Marte. Tras el fracaso de ayer, esta vez sí lo ha conseguido. Pero lo que ha fallado es el aterrizaje. La nave ha explotado justo al tocar tierra. Al parecer, la presión del tanque de combustible era demasiado baja, provocando una enorme bola de fuego.