Si hay una gran comunicadora en este país, esa es Ana Rosa Quintana. Toda una vida dedicada a informar, estando presente en los medios de comunicación y dando la cara siempre por los espectadores. Una mujer que es la viva imagen de la cadena donde trabaja y que se desvive por su trabajo. Pero, a pesar de esa cara formal e informativa, la periodista, como todo el mundo, tiene su lado natural en el que hace todas las cosas cotidianas que hacen el resto de mortales.