Paspalabra es emoción, competición, risas, conocimientos y campeones. Sus ganadores forman parte de la historia de la televisión, aunque algunos más que otros. Esto no solo se debe a su humor o cómo empatizaron con el público, sino también en el número de programas que resistieron hasta alcanzar el jugoso bote final.

El último y más recordado es el sevillano Rafa Castaño, que logró hacerse con el bote más alto de la historia del programa, que ascendía a 2.272.000 euros. Sus enfrentamientos con Orestes son legendarios y su victoria final, épica. En un entrevista concedida a El Periódico, diario de Prensa Ibérica, Rafa reconocía que quiere "vivir la vida con tranquilidad e invertirlo bien", afirmó el concursante, que abundó en el tema: "Es una oportunidad maravillosa para, si quiero trabajar, sea de lo que yo quiero y como quiero. Y, si no, intentaré vivir de la renta y seguir aprendiendo. Se abren tantas opciones... Y cuando pase un poquito esa gran ola, pensar con la cabeza y no con el corazón".