La sidra con denominación, culete a culete: 4,3 millones de botellas en 2023 tras una ligera subida

La sequía provocó que el año pasado se produjera un 15% menos de manzana selecta respecto a la última cosecha con vecería

Por la izquierda, Begoña López, Víctor Ramos y Daniel Ruiz, durante la presentación del balance de la sidra con denominación en 2023. | A. G.-O.

Por la izquierda, Begoña López, Víctor Ramos y Daniel Ruiz, durante la presentación del balance de la sidra con denominación en 2023. | A. G.-O. / Alicia García-Ovies

La sidra con denominación de origen protegida (DOP) logró el año pasado crecer, aunque muy ligeramente, respecto al ejercicio anterior. En total, se pusieron en el mercado 4.363.400 botellas con contraetiquetas del consejo regulador, lo que supone un 1% más que en 2022. Unas cifras que trasladándose a valor comercial alcanzan los seis millones de euros. "El crecimiento es pequeño, pero esperamos poco a poco volver a niveles pre-covid", indicó Víctor Ramos, presidente del consejo, durante la presentación de los datos realizada en la sede de Villaviciosa.

El lagarero considera que el envejecimiento de la población, sumado a la marcha de la gente joven, es una de las razones de que el crecimiento haya sido tan limitado, aunque se muestra optimista de cara a al futuro. "Veo más presencia de sidra de denominación en los bares y con eso me quedo, aunque todavía falta que los asturianos apuesten más por ella. Se necesita un apoyo mucho mayor", consideró.

El chigre fue, una vez más, la opción preferida por los asturianos para consumir una bebida que se disfruta mejor en compañía. Hasta el 82% de las ventas de sidra natural tradicional fueron por el canal hostelero, destacando un crecimiento de la puesta en el mercado directamente desde las tiendas propias del llagar. El resto, un 8% salieron a través de superficies de alimentación.

"Cada vez hay una mayor aceptación del consumo de producto con denominación de origen gracias al aumento de la sensibilidad de los consumidores en torno a productos sostenibles, de cercanía y calidad, como lo es la única sidra elaborada con manzana asturiana", destacó Daniel Ruiz, gerente del consejo regulador.

En lo que respecta a la cosecha de manzana, la sequía que afectó a la región el año pasado, sumado la vecería, provocó que se entregasen un 15% menos de kilos que en 2021 (anterior año impar). "No nos afectó tanto como a la sidras comunes donde se perdieron más cosechas", afirmó Ruiz. Finalmente, se alcanzaron 7.122.309 kilogramos con los que se elaboraron 2.965.465 litros de sidra.

Un escenario totalmente distinto es el de la sidra espumosa. Mientras que la sidra natural se consume en más un 90% dentro de lps límites de Asturias, los 75.831 litros que se pusieron en el mercado de sidra espumosa se vendieron en su mayoría, un 54%, fuera de la región. "Todavía va despacio. Necesitamos el apoyo de la alta restauración para intentar hacerla crecer", opinó Ramos.

El modelo de venta también varía de un producto a otro. En este caso, el 70% salió a través de las grandes superficies de alimentación, siendo tan solo un 22% la que se consumió en establecimientos hosteleros. El resto, un 6%, se vendió en las propias tiendas de los llagares.

En lo que respecta a la composición del Consejo Regulador en la región, a fecha de 31 de diciembre de 2023 se contabilizaban 31 llagares, 382 cosecheros, 855 pomaradas y 971 hectáreas inscritas. Unas cifras, en todos los casos, muy similares a las que se han venido manteniendo en los últimos años.

"La DOP está haciendo un gran trabajo. Es cierto que los datos han tocado un poco techo, pero siguen creciendo y eso es bueno. Hay que trabajar en los nuevos visitantes que van a llegar a la región y hacer hincapié en las ferias nacionales e internacionales", subrayó Begoña López, directora general de Agricultura, Agroindustria y Desarrollo Rural.

La directora general también hizo hincapié en la importancia de seguir profesionalizando el sector y el escanciado, que permite al producto regional diferenciarse. Porque, como señaló, "cada vez que se levanta una botella de sidra, se levanta Asturias". Una reflexión que compartió Ramos. "Cuando hablamos de consumo de sidra de denominación, hablamos de campo, de los cosecheros... De Asturias. Al final es apoyar al medio rural", indicó el lagarero.