La cuenta atrás para un esperado reconocimiento: el expediente para que el azabache sea BIC entra en fase de alegaciones

La propuesta pasará por el Consejo de Patrimonio antes de que la apruebe el Gobierno regional

Un puesto de azabache

Un puesto de azabache

J. A. O.

La esperada declaración de la cultura del azabache como Bien de Interés Cultural (BIC) de carácter inmaterial está un poco más cerca. El gobierno del Principado ha puesto en marcha el trámite de información pública del expediente para que las personas que estén interesadas pueden presentar aquellas alegaciones, aclaraciones o consultas que estimen oportunas. El plazo se extiende hasta el próximo 2 de mayo.

Según indican fuentes de la administración regional, la protección oficial de la cultura del azabache en Asturias "permitirá avanzar en la protección de todos los elementos tradicionales vinculados a esta materia prima, que se utiliza, principalmente, para elaborar piezas de joyería y elementos ornamentales cargados de simbolismo como, por ejemplo, las ciguas".

El siguiente paso en la tramitación será llevar el expediente al Consejo del Patrimonio Cultural de Asturias. Este organismo deberá emitir un informe sobre el que ya podrá elaborarse el decreto que, una vez aprobado por el Consejo de Gobierno, convertirá oficialmente a la cultura del azabache en Bien de Interés Cultural.

El expediente se inició en el mes de enero de 2023 y se centra en el valor cultural y social que el azabache ha aportado a la región a través de la historia. Además, también se tienen en cuenta "sus peculiaridades, al tratarse de un material singular y escaso que destaca por su brillo, color e inalterabilidad". Todo ello, añaden fuentes del Principado, "justifica un aprecio que ha llegado hasta nuestros días y que sustenta esta propuesta de protección patrimonial".

En el expediente que se encuentra en fase de tramitación se hace hincapié en la estrecha vinculación del azabache con una zona concreta de la geografía asturiana como son Les Mariñes de Villaviciosa, "donde pervivió la tradición minera hasta hace un par de décadas y se concentra el mayor número de artesanos del azabache de toda Asturias".

El sector considera que la protección como BIC es fundamental para garantizar la pervivencia del azabache.