Pasar las fiestas a los lunes

José Villazón

José Villazón

Esta semana de la Constitución y la Inmaculada lo explica por sí misma: descansar domingo, martes y jueves; trabajar lunes, miércoles y viernes. No tiene ni pies ni cabeza. Ni se descansa bien, ni se trabaja bien. Que algunos sectores vean una oportunidad de coger puentes oficiales, o puentes camuflados rebajando el desempeño de su actividad laboral, no debería servir como argumento a favor de continuar con las cosas como están. Esto último, lejos de contribuir a mantener el estatus actual, debería ser un acicate más para abordar la reforma de los festivos.

No atender debidamente las responsabilidades profesionales bajo la excusa de pseudopuentes tiene una repercusión negativa evidente, y más aún si esto se produce en instancias administrativas públicas sin alternativa. Consensuemos qué festivos no pueden moverse de fecha (posiblemente Año Nuevo, Navidad, el Viernes Santo) y el resto pasémoslo al lunes previo, o al siguiente si cae de domingo. Estaremos encantados de celebrar la Constitución, la Inmaculada, el Primero de Mayo, los Difuntos… Pero hagámoslo en lunes en beneficio de la gran mayoría, que podrá trabajar y descansar mucho más satisfactoriamente.

Creo en la democracia y, con el debido sentido autocrítico, en nuestro sistema político. Por eso confío en que nuestros representantes están en sus cargos porque tienen la vocación de mejorar la vida de los ciudadanos. Les animo a pensar en sus representados y a tomar la iniciativa de verdad en este tema. Pasar las fiestas a los lunes. Gracias.