Palabras y conceptos

Pilar Tuero

Pilar Tuero

Las palabras nombran cosas concretas o abstractas. Querer a alguien es amor, querer comer es hambre y un color es rojo o azul porque alguien así lo decidió, aunque hay personas que no distinguen el verde del amarillo o confunden el amor con las ganas de volver loco al prójimo .

Hay palabras que significan conceptos no siempre fáciles de explicar. Por ejemplo, en Japón le dan un nombre especial a un objeto que se ha roto y luego reconstruido. Quizás en España si se nos rompe algo valioso, nos lamentamos pero termina en la basura, en Japón no: algo que ha sido reconstruido con un buen pegamento aunque estuviera roto en mil pedazos tiene un nombre: kintsugi.

Esta palabra también es aplicable a cosas imposibles de arreglar con Súper glue. Si se te rompe el corazón, ves en esa tristeza una oportunidad para la curación y el crecimiento, un corazón roto es tan valioso como un jarrón pegado, lo importante es la reconstrucción .

La cultura japones es muy distinta a la nuestra. Si estás agobiado por la presión social, te tiñes el pelo de fucsia o te metes en tu habitación, no sales (Hikikomori) y no te dedicas a quemar contenedores o a liarte a tiros en el instituto. Los japoneses son el pueblo más longevo del mundo, sea por la alimentación o por el Omoiyari, que es otro concepto que consiste en intentar hacer la vida agradable a los demás.

Sin embargo y en oposición a esto, existe la palabra karōshi que significa muerte por exceso de trabajo y Marie Kondo arrasó hace una década con su novedoso sistema de quitar del medio las cosas redundantes o innecesarias de nuestra vida diaria con un beso y un ¡al contenedor!

En conclusión, no sé si trabajar mucho para sentirme útil (Ikigai) o trabajar lo justo para no morir de estrés o tirar la golondrina que se rompió la semana pasada en seis pedazos o pegarla y ponerla donde estaba.

Casi me parece más sencillo el modo de vida occidental, comprar/tirar, trabajar/ansiar la jubilación.

 Y menos sake y más sidrina.