Oviedo, Eloy MÉNDEZ

José Muñiz descubre emprendedores. El catedrático de Psicometría dirige desde hace unos meses un estudio para determinar las cualidades de individuos con una predisposición hacia la innovación laboral en edad temprana, que permita después poner en marcha técnicas de asesoramiento para que desarrollen sus capacidades. «La sociedad desaprovecha buena parte de su capital humano porque los capaces para algo pasan muchas veces inadvertidas e, incluso, ni ellos mismos saben hasta dónde pueden llegar», asegura el experto, un maestro a la hora de hacer generalizaciones sobre rasgos de la personalidad.

El grupo de investigación de Muñiz, formado por otros nueve especialistas, comenzó sus indagaciones a principios de año, después de recibir financiación hasta 2015 y la posibilidad de contar con uno de sus miembros becados. Ahora se encuentra en una primera fase técnica, que consiste en la búsqueda de un banco de ítems que ayuden a determinar las características de un emprendedor. Una vez que hayan redactado todas las preguntas, someterán el test a una muestra aleatoria de más de mil estudiantes de Bachillerato. Después, harán lo mismo con otro grupo de emprendedores adultos. Así, sabrán si existen unos rasgos definidores del éxito en el ámbito laboral y, además, podrán evaluarlos. Una herramienta muy útil para los gestores empresariales.

«Nuestro propósito es detectar la presencia tanto de extraemprendedores como de intraemprendedores, es decir, tanto de personas capaces de poner en marcha un proyecto como de introducir novedades en su propio ámbito de trabajo», resalta el psicólogo. Por eso, las cuestiones planteadas en el test medirán diferentes variables: la motivación, la capacidad de innovación, la autoeficiencia, la disposición para asumir riesgos, el optimismo y el locus de control, es decir, el grado de vinculación que establece alguien entre sus logros y la suerte. «El que piensa que las cosas salen por una cuestión puramente de azar valora poco su esfuerzo y eso es un dato significativo», razona el docente.

Los encuestados tan sólo tendrán que responder si están o no de acuerdo con las preguntas que plantee la prueba. «De esta forma, podremos averiguar cuáles son sus potenciales respecto al tema que analizamos, aunque esto no será definitivo, porque también influye muchísimo el entorno a la hora de ponerlas en práctica», asegura. «Porque los rasgos de cada uno son mucho más moldeables de lo que nos creemos. Incrementar la baja autoestima de alguien es tan sencillo como que sus padres le digan que se calle cada vez que quiere opinar cuando es un niño», añade.

No lo dice cualquiera. Referente desde hace años del análisis de las conductas humanas a través de tests, Muñiz ha estado al frente de numerosas investigaciones para medir las variables psicológicas. Por eso, también participa ahora en otro proyecto, con financiación europea, junto a los catedráticos de Estadística Ángeles Gil y Gil González, para saber cómo se aplica la lógica a las respuestas en los cuestionarios. Además, ha estado al frente de pruebas para la evaluación diagnóstica en centros educativos de la región y para detectar rasgos de esquizofrenia entre los adolescentes. «Para esta profesión tienes que sentir pasión. Además, si quieres ser bueno, tienes que echar cuatro mil horas al año. Y, para ser experto en algo, unas diez mil», sentencia.

Un registro que él supera con creces, acostumbrado a coleccionar galones desde hace años. Porque, además de haber sido decano de su Facultad y vicerrector, este catedrático que pasó tres años en la Universidad de las Islas Baleares y acumula varias estancias en instituciones académicas de Masachussetts, fue un alumno aventajado en la Complutense de Mariano Yela, considerado uno de los fundadores de la psicología moderna en España. Sus hallazgos lo llevaron a presidir la International Test Commission en los años noventa y actualmente está al frente de la Sociedad Europea de Metodología. También es el representante español de la Comisión Internacional que acaba de elaborar la nueva norma ISO-10667, que regula la evaluación de personas en contextos laborales. Y todavía tiene tiempo para dirigir la revista «Psicothema», que a partir de 2013 se publicará íntegramente en inglés y que fue la primera en el país en conseguir el distintivo de «factor de impacto» por la calidad de su centenar de artículos anuales.

«El español ha perdido por fin el miedo al psicólogo, asociado durante mucho tiempo únicamente a las enfermedades mentales», relata, mientras ojea el último ejemplar de su «criatura». «Creo que es imprescindible mejorar la relación con la sociedad porque, de alguna forma, así le devolvemos lo que nos ha dado», continúa. «No hay que olvidar que los universitarios abonan el diez por ciento de lo que cuestan sus estudios. El resto es una contribución de todos», remata, tras haber pagado con creces ese débito.

Potenciar las aptitudes. El catedrático de Psicometría José Muñiz está convencido de que es posible optimizar el rendimiento de los profesionales si se potencian sus cualidades. Por este motivo, se puso al frente del equipo que indaga en la «personalidad» propia de un emprendedor. «Tener unos rasgos concretos no es garantía de nada. Para que alguien realmente triunfe laboralmente es necesario que se dé una serie de condiciones en su entorno que le permitan potenciar esos rasgos», razona el docente. Para ello, considera imprescindible que se dote a los más capaces de herramientas que estimulen sus características. «Somos muy dependientes de los factores ambientales, mucho más de lo que realmente creemos. Además, no sólo vale con tener cualidades. No hay que olvidar que el rendimiento es igual a la capacidad por el esfuerzo, y también está delimitado por otras variables propias de la inteligencia emocional», concluye.

- El ovetense, «de Sograndio», José Muñiz estudió los dos años comunes de los antiguos estudios de su especialidad en la Universidad de Oviedo y, el resto, en la Complutense de Madrid, donde entró en contacto con el profesor Mariano Yela, su mentor y honoris causa de la institución académica asturiana.

- Tras lograr la cátedra de Psicología Matemática en la Universidad de las Islas Baleares e impartir docencia en ella durante tres años, regresa a Oviedo, en 1987, donde consigue su actual plaza.

- Ha realizado varias estancias en Estados Unidos, la primera de ellas con una beca FullBright.

- Responsable de numerosas investigaciones relacionadas con el desarrollo de tests para la medición y evaluación de conductas humanas, fue decano y vicerrector y actualmente preside la Sociedad Europea de Metodología. También dirigió hace años la International Test Commission. Es un referente internacional.

- Es el representante español en la comisión internacional que acaba de redactar una nueva norma ISO para la evaluación de personas en contextos laborales.

- Dirige la revista «Psicothema», la primera española que consiguió la consideración de «factor de impacto», que publica cuatro números y alrededor de un centenar de artículos cada año.