Max Frost consigue esos fenómenos medio fantasmales que aparecen de cuando en cuando y crean un halo de misterio. Lo hizo con "White lies", una canción que corrió como la pólvora a través de internet. El músico, al igual que Oldfield, es multiinstrumentista y en "White lies" ha dado con el punto comercial suficiente, pero también con el golpe de efecto preciso, para encajar en mundos más alternativos