Oviedo, M. P. / Agencias

El despegue del puente del Pilar multiplicó las incidencias que retrasaron vuelos en el aeropuerto de Asturias coincidiendo con la resurrección del conflicto con los controladores aéreos en los aeródromos de Alicante y Valencia. Las conexiones de Santiago del Monte con estas dos ciudades fueron dos de las que se vieron perjudicadas en un sábado difícil, con demoras constantes a lo largo de toda la jornada y alguna superior a las tres horas.

La salida del vuelo de Air Nostrum a Sevilla, prevista para las 12.50 horas, no se efectuó hasta tres horas y 21 minutos más tarde por una avería que motivó un cambio de avión y que se unió al mal tiempo en el trayecto. Los problemas de retrasos encadenados en varios aeropuertos y esa climatología adversa fueron enlazando otras demoras, entre ellas las de los Air Nostrum a los dos destinos más conflictivos ayer: el despegue del vuelo hacia Alicante pasó de las 15.15 horas a las 16.42 y la conexión con Valencia, la más complicada, retrasó algo menos de tres horas la llegada, programada para las 16.25, y otro tanto el aterrizaje del vuelo de las seis y cuarto de la tarde. La salida del vuelo de Air Berlin a Palma de Mallorca también se vio afectada y tuvo que cambiar las 16.25 horas por las 18.27.

Este comienzo del puente festivo, con miles de desplazamientos previstos, extendió los problemas desde Alicante y Valencia, según AENA debido a las ausencias de cuatro de los once controladores programados para ayer. La versión de la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA), no obstante, achaca las incidencias a la mala programación de AENA. Según el sindicato, los técnicos no se negaron a cubrir incidencias con horas extraordinarias, sino que AENA hizo su petición de ampliación de horas demasiado tarde.

USCA reaccionaba así tras asegurar el Ministerio de Fomento que la negativa de los controladores a cubrir incidencias con horas extraordinarias, «incumpliendo» el acuerdo de mínimos del 13 de agosto, había sido la causa de las demoras y perjuicios para los pasajeros en los aeropuertos españoles.