La consejería de Bienestar Social ha decidido habilitar una línea urgente de subvenciones a las familias que atraviesan dificultades económicas en Asturias para garantizar la nutrición de los niños en riesgo de pobreza. En total, según anunció ayer la consejera de Bienestar Social, Esther Díaz, el Principado dispondrá "de forma urgente" de una partida de 1,2 millones de euros para atender las necesidades de comida o los consumos energéticos de las familias en dificultades, en colaboración con los servicios de asistencia social municipales, asociaciones que atienden a estos colectivos, como Cáritas o Cruz Roja, y a través de los propios servicios de la consejería. El Principado pretende que estas ayudas económicas estén a disposición de las familias en verano, para atender las necesidades de la población infantil, una vez que lleguen las vacaciones y cierren los comedores escolares.

"Hemos optado por dar las ayudas directamente a las familias para evitar la estigmatización de los menores", manifestó la consejera, que considera que lo mejor es que los niños sean atendidos "en su propio ámbito". En otras comunidades autónomas se ha optado por abrir los comedores escolares durante el verano.