El estímulo del espíritu de la Asturias acogedora recorrió ayer el encuentro multicultural que cerró con referencias a la integración de los inmigrantes el proceso de revisión pública del proyecto de "Buenas prácticas" apadrinado por la asociación Compromiso Asturias XXI. La plataforma de profesionales asturianos residentes fuera de la región reunió a representantes de colectivos de extranjeros en el Principado e hizo suyas sus demandas en el último debate de la ronda de mesas redondas temáticas pensadas para actualizar a la realidad de 2015 las ideas de futuro que la agrupación recopiló en 2009.

En el encuentro "Diversidad cultural", celebrado ayer con componentes de las comunidades gitana, africana o latinoamericana en Asturias, el colectivo recogió al menos una iniciativa para "integrar a través de la cultura", para promover la actividad cultural acogedora y capaz de ser compartida, y al menos otra que prevé allanar la enseñanza del idioma y que conecta directamente con una de las ideas mejor valoradas de aquel documento de cien iniciativas para Asturias que Compromiso XXI recopiló y editó en 2009.

En el proceso de examen público que la asociación puso en marcha mediante la votación de las propuestas en internet, la más apreciada es la importación de un proyecto canadiense para la integración de nuevos habitantes extranjeros cualificados. En las preferencias manifestadas por los internautas, esta idea se sitúa justo por delante de la adaptación de un programa danés que incluye tres años de clases gratuitas del idioma local para refugiados e inmigrantes. La primera fue la más interesante para el 58 por ciento de los consultados; la segunda, la mejor para un 46. Además, Susana Sánchez, socia de Compromiso Asturias XXI, añadió en la reunión de ayer su propia propuesta, fruto de la observación y la participación en la Guía de Acogida y Acompañamiento de Barcelona, donde un grupo de 25 jubilados voluntarios participan en la enseñanza y el auxilio a la población inmigrante de la Ciudad Condal.

La incorporación de la política inclusiva cobra una relevancia particular en el contexto de la reversión demográfica asturiana, concluyeron los asistentes, y del retroceso de la población inmigrante en paralelo a la progresiva cronificación de la bajísima natalidad. Hay por eso en este problema al menos una oportunidad y ésta consiste, según los convocados, en la posibilidad de observarlo a la luz de las dificultades que plantea el apremiante despoblamiento rural asturiano.