Un informe realizado por la Organización Mundial de Turismo (OMT) concluye que el turismo relacionado con el deporte y la aventura cada vez gana más adeptos y resulta más rentable para la economía de los territorios. En concreto, estas prácticas generaron en 2014 más de 263.000 millones de euros en todo el mundo, con un incremento del 192% con respecto a las cifras del año anterior. De acuerdo con el estudio, la belleza del entorno natural, la oferta de actividades y el clima son los tres factores que se tienen en cuenta a la hora de elegir un destino para disfrutar del turismo de aventura.

Los expertos de la OMT justifican la reconversión de las estaciones de esquí en centros de ocio ligados a la montaña en que hay deportes como el ciclismo, el senderismo, el alpinismo o las carreras por el monte que están claramente en auge y que cada vez cuentan con un mayor número de seguidores. Además, los especialistas ponen de manifiesto que se trata de especialidades que combinan bien con el esquí, cuando hay nieve suficiente en las pistas.

"Deporte y aventura suponen una combinación muy prometedora para los destinos de montaña, tanto por el crecimiento de la demanda como por el modelo de negocio, que, debido a la atomización de proveedores y servicios, favorece que los beneficios repercutan de una manera más amplia en el conjunto del territorio", apunta la OMT en su informe.

Los expertos han constatado que desde los ochenta del pasado siglo hay un cambio significativo en las principales regiones de montaña desde el punto de vista estacional: el turismo de nieve ha crecido lentamente y el estival va en declive.