Las navidades se presentan con temperaturas cálidas y posibilidad de lluvia dentro de lo habitual. Así ha resumido el nuevo delegado territorial de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en Asturias, Ángel Gómez, las previsiones meteorológicas para las próximas fiestas, advirtiendo, eso sí, de que es muy arriesgado hablar a tan largo plazo. En el invierno (de enero a marzo) las temperaturas serán superiores a lo habitual y las precipitaciones se situarán dentro de lo normal.

"El anticiclón asegura que se mantendrá el tiempo durante toda la semana, y será el sábado y el domingo cuando se presente algo de inestabilidad y precipitaciones muy escasas. Para el martes los cielos estarán cubiertos y habrá precipitaciones más significativa. Más allá, ya es difícil hacer previsiones certeras", aseguró.

Lo que sí confirmó es que Asturias ha vivido un otoño cálido y seco, debido sobre todo a que el mes de octubre ha sido muy seco, muy cálido y se convirtió en dominante pese a que septiembre registró temperaturas 0,7 grados inferiores a la media climatológica habitual y noviembre fue un mes de temperaturas habituales.

Las lluvias caídas sobre el Principado durante el pasado otoño fueron un 20 por ciento inferiores a los valores normales, lo que se explica también por la sequía del mes de octubre, que fue "bastante anómalo", explicó Ángel Gómez. Ente septiembre y noviembre las precipitaciones fueron muy escasas en general, pero especialmente en el suroccidente de la región y en la cordillera, mientras que en la zona oriental los valores se situaron dentro de la normalidad.

El delegado territorial de la Aemet aportó tasas para dar idea de la sequía del mes de octubre, con un 87 por ciento menos de las precipitaciones que son habituales en ese mes, mientras que septiembre llovió un 6 por ciento más de lo habitual y en noviembre un 18 por ciento.

Esta situación no fue exclusiva del Principado. España ha tenido en 2017 el tercer otoño más seco desde 1965, sólo superado por los de 1978 y 1981, explicó Ángel Gómez. Si se tiene en cuenta los once primeros meses del año, este ejercicio está siendo de los más cálidos desde 1965 y el segundo más seco desde 1965. Y no sólo eso, a nivel mundial, éste es uno de los tres años más cálidos desde 1981.

"Lo normal es que se produzca una alternancia entre la temperatura muy cálida, cálida, normal, fría y muy fría. Los últimos años a nivel mundial están siendo más cálidos de lo normal y en la tendencia interanual sí se observa un aumento de temperatura que refleja el cambio climático, aunque éste proceso es muy lento", señaló el delegado de la Aemet en Asturias.