Luanco,

Illán GARCÍA

«Las cosas estaban claras, la malla de Luanco pertenece al pueblo y no a ningún particular, los tribunales hicieron justicia». Con estas palabras, el teniente de alcalde y portavoz del PP, Ramón Artime, expresó su satisfacción después de que el Ayuntamiento ganara el pleito judicial a la entonces propietaria de la marca «Malla de Luanco», Eulalia Bouzón, que había registrado ese distintivo en 1991. Las malleras de Luanco afirmaron en varias ocasiones que el hecho de que la también presidenta de la asociación de vecinos «Luanco Progresa» registrara esa marca les había generado problemas tan sólo por dedicarse a confeccionar piezas de malla luanquina.

Para el Ayuntamiento, la decisión del Tribunal Supremo viene a avalar las tesis que desde un principio defendieron las asociaciones de malleras del concejo y los concejales de la Corporación. «Ahora hay que mirar al futuro de este típico encaje luanquín», manifestó Ramón Artime, que no dudó en destacar la importancia de esta artesanía como recurso turístico del concejo de Gozón.

El alto tribunal especificó además en su última sentencia que la marca «Malla de Luanco» es compatible con la propuesta municipal siempre que se realice con una tipografía diferente. «Entonces, cualquier persona que quiera elaborar piezas de malla podrá hacerlo sin ningún problema porque se trata de un oficio tradicional, como así definimos en nuestra propuesta, eso puede dar juego a Luanco y al concejo», destacó el teniente de alcalde gozoniego.

El Tribunal Supremo, en su decisión, cargó las costas del recurso de casación presentado a la propietaria de la marca «Malla de Luanco», lo que puede derivar en un pago de unos 2.000 euros.