"Hay que contar la historia sagrada no patriarcalmente, sino feministamente". Juan José Tamayo, director de la Cátedra de Teología y Ciencias de las Religiones de la Universidad Carlos III de Madrid resumió así ayer, durante las jornadas "Feminismo, toas las miradas", cómo luchar contra lo que define como "el patriarcado extremo duro o de las religiones".
Tamayo compartió la ponencia "Religión, patriarcado y violencia contra todas las mujeres: Soportarás todos los males"con la profesora de la Universidad de Oviedo Emma González, e insistió en que "la clave para combatir los fundamentalismos es la interpretación". Ambos recordaron las palabras de Mary Daly de "si Dios es varón, el varón es Dios", y destacaron el trabajo que mujeres de diferentes religiones están realizando para luchar contra la discriminación.
"La teología ha sido secuestrada por la clerecía" o "querer convertir a un obispo es darte de bruces contra un muro de cinco metros" fueron algunas de las citas que sacaron más aplausos del público en Cabranes, además de su reclamación de un régimen laboral para "las monjas, que son tratadas como esclavas".
La matinal de estas segundas jornadas femenistas en Torazo siguió con la intervención de la granadina Carmen Reuiz Repollo, socióloga y experta en violencia de género, que aseguró que "la inmensa mayoría de las chicas que sufren violencia no lo denuncian" y detalló cómo los roles de género reafirman la discriminación.
Las jornadas las cerraron por la tarde la portavoz de igualdad del PSOE en el Congreso de los Diputados, Ángeles Álvarez; la presidenta de la Comisión de la Mujer en la Asamblea de Madrid, Clara Serra; la alcaldesa de Avilés, Mariví Monteserín, y la catedrática Amelia Valcárcel. El Pacto de Estado contra la Violencia de Género y la evolución de las medidas de protección fueron los últimos puntos de debate.
