Presidente de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales

Langreo / Mieres,

Pablo CASTAÑO

El proyecto para construir en Mieres una planta experimental de captura de CO2 será presentado mañana en la sede del Instituto del Carbón (Incar), en Lugones (Oviedo). La planta está auspiciada por Hunosa y Endesa, con la tecnología desarrollada en el Incar y con Foster Wheleer como socio tecnológico. La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) participa en la iniciativa como matriz de Hunosa. Su presidente, Enrique Martínez Robles, respalda el proyecto y anuncia ya algunas ventajas sociales y económicas si el resultado es positivo y puede tener un posterior desarrollo industrial. «Hunosa coparticipará en eventuales derechos económicos del posible éxito final del proyecto», señala.

-¿El futuro del carbón pasa por la captura de CO2?

-La combustión limpia de carbón es uno de los grandes retos tecnológicos a resolver en los próximos años. Es, por tanto, una de las muchas cuestiones a resolver en materia medioambiental y energética a la que nos enfrentamos todos, aunque lógicamente ni el carbón limpio es por sí sólo la solución para los problemas medioambientales y energéticos ni la captura de CO2 resuelve por sí misma otros muchos retos que, de cara al futuro, la extracción de carbón tiene planteados en nuestro país.

-¿Qué objetivos se plantean con la planta de captura de 1 MW de La Pereda?

-El objetivo fundamental es probar el funcionamiento de la tecnología de captura de CO2 en gases de combustión por el método carbonatación-calcinación, que ya ha sido suficientemente probado a escala de laboratorio en las instalaciones del Instituto del Carbón (INCAR) de Oviedo.

-¿Es el paso intermedio hacia un proyecto industrial de captura de CO2 en Asturias?

-Aún es pronto para hablar de proyectos a escala industrial. Nos aguardan dos o tres años de trabajo intenso en la construcción y prueba de la planta piloto de 1 MW en La Pereda. Cuando vayamos obteniendo resultados y llegando a conclusiones será el momento de debatir sobre éstas y otras posibles decisiones. Prefiero no aventurar nada. Vayamos avanzando con el rigor y la prudencia que siempre requiere un proyecto.

-¿Qué diferencias tiene este proyecto con respecto al que promueve CIUDEN en León?

-Los dos investigan la posible solución para la combustión limpia de carbón pero podemos decir que en el caso del CIUDEN se analiza la posibilidad de capturar el CO2 en las fases previas a la combustión, mientras que en La Pereda lo que se investiga es la posibilidad de separar el CO2 de los gases que surgen tras la combustión del carbón. En ambos casos participan socios comunes, CSIC y Endesa, y ambos están ubicados en cuencas productoras de carbón.

-¿Son complementarios?

-Sin duda alguna. Ambos son necesarios y a la vez complementarios. No compiten entre sí, simplemente se reparten el trabajo investigador, pero ambos proyectos y ambos equipos tienen objetivos finales comunes, comparten experiencias y responden a una misma inquietud.

-Empresas como Alstom ya están realizando pruebas en EE UU en plantas de captura de 30 MW. Están muy por delante...

-No necesariamente, cada equipo investigador y cada ingeniería de soporte se plantean su estrategia concreta con los ritmos y plazos que estiman oportuno. Nosotros preferimos ir paso a paso, no se adoptarán decisiones ni compromisos económicos sin asegurar previamente que los cimientos son los más sólidos posibles.

-¿Qué rendimientos puede sacar la empresa?

-Este es un proyecto en el que hay muchas partes implicadas, Hunosa, Endesa, Instituto del Carbón (Incar-CSIC), Foster Wheleer... Si obtenemos resultados satisfactorios habrá también un resultado socialmente positivo al que una empresa pública debe estar dispuesta siempre a contribuir y más una empresa como Hunosa, que ha tenido tanto apoyo. También tenemos articulados mecanismos concretos de coparticipación en eventuales derechos económicos derivados del posible éxito final del proyecto.

-Hunosa también tiene en marcha investigaciones sobre el aprovechamiento del metano de las capas de carbón, sobre energía geotérmica, biomasa, proyectos eólicos. ¿Quieren convertir a Hunosa en una empresa de diversificación energética?

-Dentro del proceso de diversificación de Hunosa el aprovechamiento energético de los recursos es parte del conocimiento de las personas que forman la organización y parece lógico aprovecharlos y potenciarlos con las investigaciones que se están llevando a cabo.

-De momento sólo produce energía con carbón?, ¿qué plazos se fijan para entrar en los nuevos campos?

-Algunos son inmediatos, como el de energía geotérmica, donde ya existe una instalación a punto de iniciar las pruebas en el campus de Mieres. Y otros requieren de una investigación detallada, pero, como he señalado, en estos proyectos hay que ir paso a paso, asegurando los retornos de los recursos empleados.

-Y el carbón, ¿qué papel debe jugar en el mix energético nacional?

-El que las autoridades energéticas nacionales y comunitarias decidan, aunque hay que decir también que de momento el escenario está bastante definido y marcado, al menos a nivel nacional, en el vigente Plan Nacional del Carbón 2006- 2012. Y confío en que, tras la eventual aprobación en el año 2011 de un nuevo Reglamento Comunitario de ayudas al Carbón, los que el Reglamento diga.

-El próximo año finalizan las previsiones que marcan el actual plan de empresa ¿Hay margen para ajustar aún más la producción y la plantilla de cara a próximos ejercicios o la empresa ya está en el mínimo asumible?

-Queda por delante, como ya le comenté anteriormente, la concreción de un hecho muy relevante como es la eventual aprobación de un nuevo Reglamento de Ayudas a la Producción de Carbón que condicionará lo que vaya a suceder con el sector en general y con Hunosa en particular a partir de esa fecha. Hay, por tanto, acontecimientos relevantes que aún no han ocurrido y sería temerario por mi parte aventurar un escenario o unas magnitudes concretas de cara al futuro.

-Con los nuevos desarrollos previstos, ¿podría alguna vez Hunosa sobrevivir sin ayudas públicas?

-Todas las empresas activas del sector del carbón en España y en la Unión Europea, por las características de sus yacimientos, por los costes con los que opera y por las desventajas competitivas que en general les lastran comparativamente con las producciones provenientes de otros países, requieren en mayor o menor medida ayudas públicas. Hunosa no es una excepción y aunque las ayudas percibidas se han reducido en los últimos años, su producción nunca sería posible sin subvención, aunque ésta se justifique por motivos de reducción de la dependencia energética o por motivos sociales y territoriales. Los nuevos desarrollos pueden contribuir a reducir las ayudas, pero no creo que se les pueda pedir que sean el remedio mágico que resuelva todas las restricciones o carencias competitivas a las que me he referido.