Madrid, M. P..

El mismo Ministerio de Industria, que con su recorte del 64% de las ayudas a la producción de carbón pone al borde del cierre al sector minero español, emitió el pasado viernes 15 de junio una Orden Ministerial, publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el sábado 16 y firmada por José Manuel Soria, en la que establecía «mantener la plena disponibilidad de todos los grupos térmicos (...) situados en Castilla y León, Asturias y Aragón» (entre ellos las diez centrales térmicas que consumen carbón nacional). El objetivo era garantizar «la continuidad de suministro de energía eléctrica y preservada la estabilidad del sistema eléctrico ante la huelga general convocada en las comarcas mineras de Asturias, Aragón, y Castilla y León prevista para el día 18 de junio de 2012 ente las 0 y las 24 horas».

El Ministerio de Industria, Energía y Turismo establecía, "mediante la presente orden, que los servicios mínimos por parte de las empresas eléctricas afectas al servicio esencial de suministro de energía eléctrica, durante la huelga general convocada en las comarcas mineras de Asturias, Aragón, y Castilla y León, serán los necesarios para garantizar el servicio esencial de suministro de energía eléctrica así como la seguridad de las personas y las instalaciones afectas al mismo, que habrán de mantenerse a los niveles operativos reglamentarios».

La Orden Ministerial, emitida por Industria en la que se reconoce la necesidad de mantener operativas las centrales térmicas que queman mineral autóctono para asegurar el suministro energético, recoge las recomendaciones lanzadas dos días antes, el 13 de junio, por el Operador del Sistema, Red Eléctrica Española, en las que establece que «en condiciones de muy bajas producciones eólicas», como se preveía que sucediese el lunes 18, «y fallo fortuito muy elevado de generadores, el margen de cobertura podría reducirse considerablemente por lo que resultaría necesaria la contribución de toda la generación térmica disponible». En particular, «en Castilla y León, Asturias y Aragón», continúa el informe de Red Eléctrica Española «están ubicadas centrales térmicas convencionales, en su mayoría de carbón, que suman una potencia de unos 9.022 MW lo que supone una aportación imprescindible al sistema eléctrico peninsular español».

Así, Red Eléctrica Española sentencia en el informe que la disponibilidad de las centrales generadoras del sistema es «esencial» para cubrir la demanda puntual de energía eléctrica a lo largo de todo el día 18 de junio de 2012.

La Orden Ministerial que reconoce la importancia del carbón nacional como «imprescindible» para mantener la seguridad de generación y suministro eléctrico es, para el gerente de UMINSA y miembro directivo de Carbunión, Gerardo Biaín, una «prueba palpable de la sinrazón de todo lo que está ocurriendo» y al Ministerio de Industria, Energía y Turismo «le debería de hacer reflexionar» si «ni tan siquiera pueden prescindir un día de la cobertura que dan las centrales que consumen carbón nacional». Igualmente, considera Biaín, a «algunos 'expertos' como los que elaboraron los recientes informes de la CNE y otros gurús de la prensa energética que negaban la importancia del carbón nacional para la garantía de suministro, se les debería caer la cara de vergüenza».